Desde que en septiembre de 2018 el nuevo Buque de Acción Marítima, BAM, “Audaz llegaba a su base de despliegue en Cartagena, la tripulación del nuevo barco de la Armada sabía que le esperaba un largo recorrido de pruebas, exámenes, test y verificaciones hasta verificar que el navío estaba listo para operar en un entorno operativo real.

Y de hecho esta batería de pruebas duró casi un año hasta que en julio de 2019 se emitía finalmente el certificado oficial que verificaba que el “Audaz” estaba listo para operar en acciones reales. Con su gemelo el "Furor" en la misma base y cumplimentando sus propias pruebas, solo quedaba esperar que se diera la oportunidad de participar en una acción real y esta se ha dado ahora con el despliegue del “Audaz” en misión de “seguridad marítima” en el Golfo de Guinea.

La seguridad marítima es un concepto amplio

La experiencia operativa de las distintas marinas de la UE en la Operación Atalanta y los resultados operativos obtenidos con el tiempo indujeron a sacar ciertas enseñanzas estratégicas que superaban la mera lucha militar contra la piratería y que daban que combatir este fenómeno implicaba un aspecto más amplio.

La lucha contra la piratería no se soluciona simplemente con la acción de unidades navales contra los piratas, y menos mientras este fenómeno está inducido por las terribles condiciones de vida de los países de origen los cuales necesitan de ayuda al desarrollo y soporte económico.

La lucha contra la piratería no puede circunscribirse al mar, hay que atacar y destruir las bases piratas en tierra.

Además es una tarea común a todos los aliados, ningún país puede pensar en llevar esta campaña por si solo.

El mejor modo de combatir a la piratería es por parte de fuerzas propias de los países anfitriones que se enfrenten al enemigo en su terreno. Esas fuerzas deben ser entrenadas y adiestradas por unidades occidentales para lograr ese nivel de eficiencia preciso.

Los delitos de piratería deben ser juzgados por tribunales legítimos e imparciales en sus países de origen. Y los gobiernos legítimos de las naciones de origen del fenómeno pirático deben ser apoyados en esta lucha contra el filibusterismo.

Se precisa una presencia militar y naval real en la zona para demostrar que los gobiernos locales tienen ese apoyo real en la lucha contra la piratería.

Con ello el mero concepto de perseguir piratas en la mar quedó superado por la idea de aplicar en el mar esta serie de enseñanzas que aplicadas a la operatividad naval se engloban en el concepto de “seguridad marítima”.

El Golfo de Guinea, entorno operativo

Al partir el día 1 de marzo desde su base de Cartagena, el “Audaz” participará en una campaña de seguridad marítima de cinco meses que le llevara a recorrer el Golfo de Guinea con escalas en Noadibou (Mauritania), Accra (Ghana), Doula (Camerún), Walvis Bay (Namibia), Luanda (Angola), Port Gentil (Gabón), Lagos (Nigeria), Sekondi (Ghana), Dakar (Senegal) y Praia (Cabo Verde). Esto en una campaña de cinco meses que previsiblemente acabará en julio cuando el “Audaz” sea relevado por el BAM “Tornado” en Las Palmas de Gran Canaria y que continuará la misión.

Este periplo se cumplimentará con contactos y cooperación con las autoridades locales en cada puerto visitado y trabajo con las autoridades diplomáticas de España. Adiestramientos con las fuerzas locales en temas de seguridad marítima y lucha contra la piratería ya en técnicas de defensa de buques, abordaje y neutralización de barcos pirata, rescate de rehenes, registro de buques, búsqueda de indicios, comprobación de documentación, actuación en emergencias, asistencia médica y primeros auxilios.

Además se trabajará en cooperación con otras armadas presentes en la zona como EEUU, Francia y Portugal. Con las que se realizarán tareas de vigilancia de las rutas marítimas, protección al tráfico naval, represión del contrabando de armas e ilícitos, lucha contra el terrorismo y protección de infraestructuras críticas.

En cooperación con las armadas aliadas se participará en los ejercicios “Obangame Express 2020” y “Grand African NEMO 2020” que organizados por las armadas de Francia y EEUU respectivamente que buscan afianzar en la zona el concepto de seguridad marítima.

Las capacidades del 'Audaz' mejoran lo anterior

No es la primera vez que unidades de la Armada se despliegan en el Golfo de Guinea pues buques como el “Serviola” o elInfanta Cristina ya se desplegaron antes en ese área. Pero el despliegue de un buque tan moderno como el BAM “Audaz” mejora ese despliegue por su tecnología y automatismo que reduce su tripulación a solo 70 efectivos.

Como ejemplo, el armamento de 76 y 20 mm del navío está centralizado desde el Centro de Información y Combate, CIC, del “Audaz”, aparte de los equipos de ametralladoras y de seguridad que se despliegan en cubierta al ordenarse zafarrancho de combate, lo que da una ventaja total en combate.

Desde el CIC el operador puede hundir cualquier esquife pirata a distancia solo colocando al enemigo en la cruz filar que aparece en su pantalla y haciendo fuego, por muy rápido que este vaya.

La despedida desde Cartagena fue emotiva

Familiares y amigos se reunieron en el Muelle del Arsenal de Cartagena para despedir al “Audaz”, antes de la salida el comandante del buque, Capitán de Corbeta. Santiago García Reyero, ilustró a los periodistas sobre las características de la misión y el Capitán de Navio Jorge Hernández de Armijo en su papel de Comandante de Unidades de Acción Marítima de Cartagena, COMARCAT animó a la tripulación a “mantener el pabellón de España muy alto” en las operaciones con las unidades locales y aliadas. Al son de la marcha “Ganando Barlovento” y entre vítores y lágrimas de amigos y familiares el “Audaz” zarpó. La misión está por delante.