Usados profusamente en todos los conflictos con los que se ha iniciado el Siglo XXI, los "Drones" (Zángano, en inglés) se han convertido en una realidad profusamente usada en todo conflicto bélico ya sean usados como plataformas de reconocimiento, que fue su uso original ya probándose modelos rudimentarios en la Guerra de Vietnam.
Como bombarderos radiocontrolados manejados a distancia y empleados de forma masiva ya sea en Iraq, Afganistán, Siria y otros lugares o como misiles crucero teledirigidos que se estrellan cargados de explosivos contra objetivos estratégicos, como el realizado contra refinerías de petróleo de Arabia Saudí el pasado 14 de septiembre que paralizaron la producción de petróleo durante más de dos semanas.
Y esto tomando como modelo este ataque realizado por drones de construcción iraní, aunque la autoría del ataque todavía esta en cuestión, que el Ejército del Aire, EDA, ha modificado su anual ejercicio Dardo de combate aéreo para elaborar tácticas que permitan contrarrestar un hipotético ataque con drones contra España semejante al sufrido por Arabia Saudí.
La planificación de la operación es a conciencia
"Dardo" es el ejercicio específico para tiro aire-aire que el EDA ejecuta cada año para simular combates aéreos con fuego real. Su nombre viene de cuando en los años 70 el EDA empezó a recibir material moderno y entre él se recibieron una serie de blancos aéreos que lanzados a gran altura planeaban hasta el suelo y en ese tiempo debían ser derribados con misiles y fuego de cañón.
Como estas dianas aéreas tenían una forma que recordaba a la de un dardo, de ahí el nombre del ejercicio.
Usando hoy día aviones blancos radiocontrolados, de hecho drones cuales otros, el principio era que imitaran a otros aviones de combate, pero la amenaza de drones bélicos obliga a variar la naturaleza de la misión para juntar en este ejercicio tanto el enfrentarse a aviones no tripulados como a cazas convencionales e incluso drones navales.
El Ejército del Aire hizo un gran despliegue de medios para el ejercicio
Para este desafío el EDA desplegó el máximo de sus capacidades: sus Alas de combate 11 y 14 equipadas con Eurofighter, las Alas 12, 15 y 46 dotadas de F-18, sus unidades de operaciones especiales EADA y SEADA, equipados con misiles antiaéreos Aspide y Mistral y efectivos del CLAEX para testar los resultados de los ejercicios.
Además de equipos de control aéreo como el GRUMOCA, así como elementos SAR de rescate y un P-3 Orión de patrulla marítima.
El ejercicio se cumplimentó en el Estrecho de Gibraltar desde mediados de septiembre a inicios de noviembre empleándose el campo de tiro de Medano del Loro cerca de Huelva para hacer las pruebas con drones. El motivo es doble, se encuentra allí el campo de pruebas del Arenosillo donde el EDA experimenta con blancos aéreos y la gran cantidad de infraestructuras existentes en la zona del estrecho permite recrear múltiples objetivos (puertos, refinerías, almacenes, silos, fábricas) tanto para atacar como para defender.
Se busca la interceptación de drones en el aire
La estrategia lógica para defender un objetivo de un ataque de drones aéreos es realizar una defensa en varias capas.
Cuando se detectan las oleadas de drones en las pantallas de radar los cazas parten a interceptarlos, a media distancia los Eurofighter y F-18 usan los misiles AIM-7P "Sparrow" de medio alcance, los drones que escapen a este primer dogal se encontrarán entonces con el fuego de los misiles Iris-T de corto alcance de los cazas, para que por última línea de defensa aérea y ya en alcance visual se empleen los cañones de 27 y 20 mm en un combate aéreo clásico.
A notar que dado el coste de un dron comparado con el de un misil aire-aire, el derribo de un dron por fuego del cañón de un caza es la opción más económica.
Si algún dron escapa a esta "carrera de obstáculos" sería abatido por la defensa antiaérea que mediante los misiles Aspide de medio alcance y Mistral de corto, a los que se sumarían cañones antiaéreos, esto ya en la defensa inmediata de los objetivos específicos.
Aparte de los derribos aéreos, se realizó el hundimiento de un dron marino. Imitaba una lancha suicida cargada de explosivos que atacaba un barco, que fue hundido por un misil Maverick aire-superficie disparado por un F-18.
El veredicto de la Operación Dardo es positivo
El Ejército del Aire quedó muy satisfecho con los resultados de la Operación Dardo sacando como lección que si una ataque similar al saudí se produciría contra España, el EDA "estaría preparado para repeler un ataque similar en caso de producirse".
Ahora bien, este veredicto esta sujeto a un factor primordial. En este ejercicio, el EDA tenía todas sus defensas levantadas con sus radares en alerta, sus cazas patrullando y sus sistemas antiaéreos escudriñando el cielo.
Había una alerta clara y un aviso.
El ataque contra las refinerías saudíes tuvo lugar en un estado de alerta cotidiana, con los cazas en alerta normal, con pocas baterías de misiles desplegadas y sin alarma ni preaviso.
Es dudoso pensar que ante un ataque sorpresa e inesperado ni España, ni ningún otro país del mundo, puedan desplegar sus defensas a tiempo para repelerlo.