La búsqueda obsesiva por la belleza ha llevado cada vez más jóvenes mujeres a buscar métodos no convencionales para conseguir el cuerpo deseado, algunas han tenido suerte y lo han logrado, a otras no les ha ido muy bien y han encontrado hasta la muerte. La búsqueda por el patrón de belleza impuesto por la industria de la moda ya ha llevado a chicas a la bulimia, anorexia y muchas la consecuencia ya mencionada anteriormente, la muerte. Hoy en día, la gran moda es inyectar sustancias nocivas a la salud en las partes que ellas quieren ver más grandes y con más rapidez, dejando de lado los gimnasios, pues según las mismas el proceso del gimnasio dura mucho.
Cuales son los productos mas comunes
Los productos más utilizados son: hidrogel, silicona industrial, aceite mineral sin hablar de los esteroides anabolizantes, siendo estos últimos causantes, a menudo, de cáncer. Antes, estos productos eran más utilizados por travestis, para obtener el cuerpo más femenino (principalmente la silicona industrial). Muchas han quedado deformadas, pues ese producto sale del lugar con facilidad. Algunas se colocaron silicona en la cadera y se detuvo en el muslo, otras colocaron en las pantorrillas y paró en los tobillos. Cuando se aplica en los senos, corre el riesgo de infiltrarse en los pulmones, causando embolia pulmonar. Después, buscan médicos cuando ya no hay nada que hacer y cuando ya la sustancia suministrada no tiene condiciones de ser retirados.
Que consecuencia negativa puede traer esto
Muchas personas quedan marcadas perdiendo totalmente la parte del cuerpo afectada. Es importante recordar que quienes hacen estas aplicaciones son los propios travestis. La gran preocupación ahora es que las jóvenes mujeres se están dejando llevar por estos métodos arriesgados y muy peligrosos.
Estos últimos casos que están apareciendo en los medios de comunicación son sólo una parte de los casos que salen a la luz, la mayoría de estos sucesos no se dan a saber por las noticias.
La vigilancia sanitaria, junto con el Ministerio de Salud tienen que intensificar las fiscalizaciones, pues esto no va a parar ahí. Esta práctica es mucho más antigua y mucho más común de lo que se imagina.
Hay que haber una gran campaña, por un lado, mostrando mujeres hermosas y naturales, del otro, mujeres también lindas, pero a costa de esos métodos. Después, se muestra el futuro de cada una, para llegar a una conclusión, pues la cosa es mucho más seria de lo que se imagina. La concientización: esa es la mejor manera de prevenir y saldrá mucho más barato para el ministerio de salud.
