El arzobispo de Dublín, Diarmuid Martin, pidió hoy al papa Francisco que hable "abiertamente y con franqueza" del pasado de la Iglesia en Irlanda en la visita al país que tendrá lugar la próxima semana, y aseguró que "no basta pedir perdón".
En su homilía dominical en la iglesia de Santa María, conocida como pro-catedral de Santa María, en Dublín, Martin dijo que "Las costumbres que antiguamente permitieron actitudes y abusos por parte de la iglesia católica deben ser eliminadas en su totalidad, el público debe conocer la historia antigua de la iglesia y no debemos ocultarla en la actualidad".
Dublín se está preparando para a finales del mes en curso celebrar el décimo Encuentro Mundial de las familias,por lo cual el papa latinoamericano ha planeado hacer acto de presencia en la conmemoración de la visita que hizo anteriormente el papa Juan Pablo II a la capital de Irlanda. El arzobispo al respecto afirma que "La vista del papa es símbolo de paz y esperanza para los pueblos del mundo, es el generador de un mensaje positivo para las multitudes cristianas"
Los errores de la iglesia católica
El arzobispo irlandés reconoció que la Iglesia ha demostrado "arrogancia" en los últimos años ante la escalada de revelaciones sobre casos de abuso de menores, tanto en Irlanda y en todo el mundo. "La indignación del pueblo hacia la iglesia católica ha sido causada por muchos factores, tales como el racismo, la exclusión, y los casos de pedofilia", afirmó en la homilía.
En Estados Unidos se produjo recientemente un nuevo escándalo que envuelve negativamente la imagen de la iglesia católica, lo cual ha generado diversos comentarios, como los dados por el arzobispo de Dublín en el marco de la visita del Papa Francisco. La iglesia irlandensa tampoco ha escapado del desprestigio pues,recientemente fueron descubiertos una serie de casos de abusos de menores que fueron llevados a cabo ante la mirada complaciente de la iglesia católica de ese país.
La gran marca de la inquisición
En la era medieval de Europa la iglesia gozó de un poder casi absoluto, y sus leyes eran muy estrictas, a tal punto que lo que se calificaba como herejía generalmente era penado por la muerte. Además de ello la iglesia fue famosa por dedicar muchos esfuerzos a crear nuevos métodos de tortura con el fin de acabar con los herejes y personas que practicaran otras religiones, así como también quienes cometieran pecados que hoy en día se consideran de la cotidianidad, por estas razonas la iglesia católica ha venido perdiendo popularidad en la era actual.