La alimentación es un tema del que pocos hablan, ya que lo creen bastante simple y sin importancia. En la actualidad hay muchas personas que se cuidan – sin caer en los excesos – pero todo lo que implica la nutrición todavía es una temática de revista de mujeres y vanidad, mucha pero mucha dosis de vanidad. Los médicos tanto como las instituciones, concientizan a la población a cuidar de su alimentación, no por ser estéticamente más agraciados, sino por mantener una salud en equilibrio, para que no desemboque en otras afecciones y enfermedades.
Hoy en día muchos hombres – quizá un poco más que el público femenino – cuida su cuerpo y son más selectivos al elegir alimentos, en cada comida del día. La agitada rutina y los cambios de horario afectan la manera en cómo nos alimentamos. En verano por lo regular nuestra ingesta de carbohidratos baja un poco, y nos sentimos un poco más inclinados por alimentos líquidos y frescos. El clima y lo invariable de este, puede generar cambios apenas perceptibles, por lo que una de nuestras recomendaciones es balancear las colaciones con las tres comidas del día.
Jamás entre comidas: el desayuno es la comida más importante del día
Expertos asocian los tiempos de las comidas, con el orden de los ritmos circadianos del organismo. Estudios – Facultad de Fisiología, Murcia – España – revelaron que al adelantar el horario de las distintas comidas, se redujo el peso en las participantes que tuvieron esta regla para alimentarse. Otra serie de estudios – Universidad de Illinois, EE.UU – también precisaron una información similar a este hecho, ya que llevar a cabo la primera comida – el desayuno – en un horario más tardío, dio como resultado índices más altos de masa corporal.
Células y el tic tac
La nueva rama de esta ciencia, se llama crononutrición, y aunque los expertos siguen investigando, el motivo de los análisis.
Esta correlación entre los alimentos y el reloj biológico, podría explicar cómo se comportan las células en el procesamiento de los alimentos, a nivel hormonal.
Al guiarnos por este reloj, significa que un desayuno rico y balanceado por la mañana es saludable y que la cena tendrá que ser en pequeñas porciones, para que nuestro cuerpo metabolice mejor los alimentos. La regla de antaño. Si eres de los que buscan una abundante cena por las noches, más vale cambiar un poquito los hábitos, para perder peso y que la salud de tu cuerpo no se vea afectada.