Este viernes se llevó a cabo la detención en Francia de un hombre de 47 años de edad, por su presunta vinculación con el ataque islamista perpetrado el jueves en la ciudad de Niza, específicamente en basílica de Notre Dame.

Informa el diario Nice Matin, que el sospechoso será interrogado por haber hecho contacto, un día antes, con el terrorista que acabó con la vida del sacristán de la iglesia, y de dos damas que se encontraban dentro de ella, armado de un cuchillo de 30 cm de largo, atentado ejecutado sobre las 8.30 am.

Entrega celular al terrorista

Se presume que el detenido hizo entrega al extremista, de uno de los celulares que portaba para el momento del ataque. Brahim A, el islamista tunecino de escasos 21 años de edad, se halla recluido en un hospital por las heridas que le infligió la policía.

Vale destacar que, dentro del recinto eclesiástico, los investigadores hallaron las pertenencias del atacante metidas en una bolsa, entre las cuales se encontraba un facsímil del Corán, dos cuchillos adicionales a los utilizados en el crimen y un instrumento de la Cruz Roja de Italia, donde figuran sus datos.

Para el momento, las investigaciones están enfocadas en rehacer el itinerario y las causas que motivaron a Brahim A.

trasladarse desde su país natal Túnez, a la ciudad de Niza en Francia, para consumar un atentado más a cuchillo, que suman tres en ese país, en menos de un mes.

Para el momento no se sabe si salió de Túnez con el plan preconcebido, o si fue impulsado por el ambiente hostil que vienen manifestando ciertos líderes musulmanes hacia Francia, luego de las medidas adoptadas por el presidente Emmanuel Macron, frente al islamismo radical.

Itinerario del terrorista

Se tiene información que el fanático islamista, el cual no aparecía en registros de terrorismo ni era conocido por las autoridades, ingresó a Europa mediante la italiana isla de Lampedusa, a mediados de la segunda quincena de septiembre.

Fue puesto en cuarentena por Covid-19, en una embarcación, de acuerdo al diario Le Parisien. Desembarca en la región de Bari, al sur de Italia el nueve de septiembre.

Desde entonces se le pierde el rastro, hasta la primera hora de la mañana del día 29 de octubre, momento en que las cámaras de vigilancia le graban en la estación de tren de Niza. Allí se mantuvo aproximadamente por hora y media. Se cambia una muda de ropa en un edificio cercano, el cual abandona a las 8.13 horas, y a las 8.29 horas ingresa a la basílica de Notre-Dame, ubicada a 400 metros de la estación.

Sucesos dentro de la iglesia

Acá comienza su aventura criminal dentro del templo donde permaneció por media hora. Inicialmente, decapita una señora de 60 años, de la cual no se tiene identidad.

Seguidamente, asesina al sacristán de la iglesia Vincent Loquès, de 54 años que dejó huérfano a dos hijos; el cual era un empleado laico, a quien le infiere una herida profunda en su cuello.

Igualmente, deja con una herida grave a Simone Barreto Silva, mujer brasileña de 44 años, madre de tres hijos y residenciada en Francia desde hace treinta años.

En plena tragedia, esta mujer logra escapar del templo e intenta resguardarse en un restaurant contiguo, pero fallece. La cadena BFM TV, registra sus últimas palabras: “Decid a mis hijos que los quiero”. Entre tanto el extremista se afrontaba a las agentes policiales y gritaba Allahu akbar (Dios es grande).