La bomba helada es un postre típico y tradicional de las heladerías italianas, y la llamada "Zucotto", la más famosa en Italia, se elabora en la Toscana, aunque se dice que fue inventada por un toscano que vivía en Milán. Independientemente de su origen, este postre es una tarta que sorprende a cada cucharada.

Ingredientes

Para la tarta usaremos los siguientes ingredientes:

  • 1 litro de crema de leche o nata para montar
  • 100 gramos de azúcar en polvo o azúcar glass
  • 80 gramos de almendras tostadas y picadas
  • 80 gramos de avellanas tostadas y picadas
  • 150 gramos de chocolate fondant rallado
  • 1 bizcocho de unos 500 gramos
  • 1 Vasito de Brandy
  • 1 vasito de ron
  • 1 vasito de kirsch
  • Cacao y azúcar en polvo para la decoración

Preparación de la tarta

Comenzaremos montando la crema de leche o nata en un recipiente grande.

Para esto la batiremos a velocidad alta y es mucho mejor si los instrumentos y el bol están muy fríos, así costará menos. Conforme vayamos batiéndola añadimos el azúcar y los frutos secos que tenemos tostados y picados. Finalmente añadiremos el chocolate fondant a la mezcla.

Ahora trabajaremos con el bizcocho. Empezamos cortándolo en distintos pisos de un centímetro y medio de grosor. Una vez los tengamos los bañamos con los tres licores, los cuales habremos mezclado en un vaso, dejándolos bien humedecidos. Finalmente usaremos estos bizcochos para revestir un molde que tenga forma de cúpula, poniéndolos bien apretados contra este, los cuales harán de capa exterior del pastel. Reservamos un poco de bizcocho que no hayamos bañado en licor.

Ahora vertemos dentro del molde el relleno de nata montada que hemos preparado previamente, ayudándonos de una cuchara o espátula para extenderlo bien y llenar todos los huecos que pudiera haber. Con el bizcocho que hemos reservado cubrimos la nata haciendo así una base para nuestro pastel.

Ahora reservamos la tarta en el congelador durante un mínimo de dos horas, permitiendo así que la nata tome una textura de helado, lo que hará que tenga el frescor y la textura que da nombre al pastel.

Una vez haya pasado el tiempo lo sacaremos del molde volteándolo, obteniendo la tarta en forma de cúpula. Se puede decorar opcionalmente con cacao y azúcar en polvo por encima, haciendo diversos diseños y dibujos.

Cuando hagamos el relleno también podemos añadir otros ingredientes si lo preferimos, u otros sabores a la nata. Desde fruta a diversos siropes o cremas, cualquier cosa vale para obtener una tarta a nuestro gusto que nos deleitará en los días calurosos.