Las gomitas o gominolas, como también se les llama, son una especie de caramelos masticables Dulces, elaborados a partir de gelatina a la que se les añaden saborizantes y colorantes artificiales. Llevan un recubrimiento de azúcar para que no se peguen lo que le da un aspecto abrillantado. Son una golosina ideal para niños ya que aparte de su fácil preparación son una alternativa sana.
Hacer en casa las gomitas puede resultar en una divertida explosión de alegres sabores y colores, no solo para los pequeños de la casa, sino que también puedes hacerlas para decorar fiestas, ofrecer a invitados o regalar, ya que son una dulce tentación que a muchos adultos les encanta disfrutar
Prepararlas es más fácil de lo que la mayoría de la gente se imagina.
Al hacerlas se pueden cortar de cualquier forma y además se puede personalizar la receta según los sabores que se prefieran. Lo importante es preparar la mezcla de la gelatina y esperar suficiente tiempo, para que esté firme, luego cortarlas y azucararlas. A continuación una receta casera y sin mucha técnica.
Los Ingredientes necesarios
- 5 cucharadas de gelatina sin sabor
- 3 tazas de azúcar
- 2 tazas de agua
- 1 cucharada de ácido cítrico, bien sea en polvo o liquido (esto para dar un sabor ácido a las gomitas)
- Color y sabor artificial
- Azúcar para decorar
La Preparación
En una olla se ponen al fuego las tres tazas de azúcar con una taza de agua y se va revolviendo constantemente hasta disolver y hacer un caramelo.
Aparte en otra olla se coloca la otra taza de agua y la gelatina sin sabor y se le agrega el ácido cítrico. Si es en polvo debe disolverse primero en una cucharada de agua.
Cuando esté listo el caramelo se le añade la mezcla de la gelatina sin sabor esperando que se disuelva por completo, luego se revuelve y se reparte la mezcla en varios moldes y se le agrega color y sabor artificial, según el gusto.
Seguidamente se deja cuajar a temperatura ambiente y se deja reposar, puede ser durante toda la noche. Es importante no colocar en la nevera ya que se humedecen y se dañan.
Al día siguiente ya la mezcla estará firme, se procede a sacar del molde y a darle la forma a las gomitas según el gusto, bien sea con un cortador de galletas, o con un cuchillo y se forman triángulos, cubos o las formas que se prefiera. Por último se pasan por azúcar, cuidando que queden bien azucaradas para evitar que se peguen unas con otras, y se dejan reposar. Y ya están listas para comer.