El 80% de las enfermedades del corazón, el 90% de los casos de diabetes y el 70% de los casos de algunos tipos de cáncer están relacionados con los hábitos de vida que incluyen la alimentación. Una dieta desequilibrada está indicada, junto con el tabaco, ya que dos de las mayores causas de muerte en todo el mundo. Por ahí ya que vemos como una dieta saludable puede tener una influencia positiva en todos los aspectos de la vida. De bono, si alimentarse bien puede contribuir a la estética corporal aún más cuando está aliada a ejercicios físicos. ¿Pero qué es comer bien?

¿Cómo saber qué comer?

Las noticias médicas sobre alimentación aparecen en todo momento en los medios. En el caso de que se produzca un cambio en la calidad de vida de las personas, Las nuevas dietas surgen, y muchas veces la nueva "moda" desmiente lo que la anterior decía. ¿Cuántas veces el huevo pasó de villano a mocinho? Ahora es el turno de la leche y del gluten.

Se equivoca al depositar tanta confianza en cada nuevo estudio que surge. Y, si pensamos que los estudios que investigan los efectos de la dieta en los seres humanos e incluso los alimentos de forma general son muy recientes - tienen alrededor de medio siglo - ponderaríamos mucho más antes de ir detrás de la nueva norma del mundo de las dietas.

Sin embargo, estos estudios, demarcan un punto de partida para investigaciones más profundas y traen aspectos, puntos en común.

Puntos que son suficientes para conseguir comer de manera sana. Por ejemplo, ya se sabe que una alimentación rica en granos integrales y vegetales variados hace bien, así como variar la fuente de proteína.

Pasar mucho tiempo sin comer hace mal, pues el organismo entiende que tiene que almacenar lo que recibe en forma de grasa - por lo que se recomienda comer de tres en tres horas, lo que contribuye también a acelerar el metabolismo, ayudando en la pérdida de peso. Basar la dieta en arroz blanco y el azúcar hace mal. Hacer de la comida un ritual tranquilo y placentero hace bien.

Y cuando queremos hacer las paces con la balanza

Una alimentación saludable de hecho puede ayudar a lograr el cuerpo deseado. En realidad, la alimentación es el punto de partida. Si reeducar a la hora de la comida es el ideal y estos cambios ayudan a: eliminar las toxinas del cuerpo, que causan hinchazón e impiden el funcionamiento pleno y correcto del organismo; combatir la retención de líquido, eliminando la hinchazón (que a menudo es responsable del saliente en la barriga); promover el buen funcionamiento intestinal; acelerar la quema de grasas general del cuerpo (incluyendo la abdominal); reducir la inflamación abdominal.

Cómo empezar

Adoptar algunos hábitos puede ser el punta pie inicial para una vida mejor y consecuentemente un físico mejor.

  • Incluir los alimentos fibrosos en la dieta. Hojas y vegetales, semillas, frutas con cáscara. Todo esto contribuye al mejor funcionamiento del intestino y consecuentemente auxilia en el proceso digestivo. Sólo no se puede olvidar si las fibras están entrando agua también debe entrar juntos. Los médicos y los nutricionistas recomiendan al menos 2 litros de agua al día.
  • Eliminar toxinas: buscar alimento en la naturaleza,nada procesada. Evite azúcares que no sean del propio alimento, o sea, aquel dulce deje para ocasiones especiales. Y, si no se saciar con el azúcar de las frutas opte por el chocolate con un mínimo de 70% de cacao.
  • Y no se olvide: las grasas y los hidratos de carbono deben estar presentes en la dieta. Pero prefiera las grasas encontradas de los pescados, las nueces y el aceite de oliva. Y, entre los carbohidratos, elija aquellos presentes en granos enteros, frutas y verduras.
  • No sea radical, no salga cortando todo de la dieta busque sustitutos. Intente cambiar la lechuga americana de su ensalada por espinaca, que tiene diversos nutrientes y fibra. Y alterne bifes con soja, pollo o peces, por ejemplo.