Esta semana se celebró el año nuevo chino. ¿Por qué se celebra en una fecha tan extraña?

Tradición y Modernidad

A pesar de que a principios del siglo XX, la República de China comenzó a adoptar el moderno calendario occidental o calendario Gregoriano, la cultura oriental da mucha importancia a las tradiciones. Es por ello que muchas de sus fiestas se rigen por el calendario tradicional, el cuál es de carácter lunisolar. Pero, ¿qué significa esto?

Calendarios Solares

Calendario Solar es todo aquel que se rige por los ciclos del Sol, ya sea por la posición de la Tierra en su órbita traslación (año sideral), o por la inclinación de la estrella con respecto a nosotros (año trópico).

El primer calendario solar que se conoce es el calendario egipcio, datado entorno al 3000 a.C. Constaba de 12 meses de 30 días cada uno, divididos en 3 períodos de 10 días, y 5 días que se sumaban al último mes (llamados epagómenos). En total 365 días.

Conocían que existía un cuarto de día (6 horas) de más cada año, y que cada cuatro años era un día, pudiendo crear años de 366 días, como nuestros bisiestos, pero el clero era receloso de cambiar las tradiciones y simplemente se llevaba la cuenta del desfase entre el calendario civil y astronómico. Así, se considera el calendario egipcio como un calendario errante, donde cada 730 años, las fiestas cambiaban de estación, y cada 1460 años, se volvían a celebrar el mismo día astronómico que en el que se pensó.

Este conjunto de años se llama ciclo sotíaco.

Posteriormente, en el Imperio Romano, se adopta un calendario solar, el calendario Juliano, usado tras el ascenso de Julio César y la conquista de Egipto, para sustituir el calendario Romano. Se basaba en el calendario egipcio, y se adelantaba al año solar en 1 día cada 128. Siglos después, se hizo una modificación en 1582, por el Papa Gregorio XIII.

Así, el calendario gregoriano sólo adelantaba 1 día cada 3324 años. La diferencia de tiempo es de un 0,002 %, y sin embargo la exactitud era muy distinta. Así, acabó siendo nuestro calendario actual.

Otros calendarios solares a lo largo del mundo son el Sánscrito, el Malayo, el Hindú o el Persa.

Calendarios Lunares

Los primeros ciclos naturales en ser detectados por el ser humano son los de la Luna.

Coincidían con momentos importantes como los ciclos menstruales o las mareas, por los que no es de extrañar que existan multitud de calendarios lunares. Un mes lunar tendría 29,53 días. Calendarios estrictamente lunares son el inca y el musulmán.

El calendario islámico o musulmán comienza en el 622 d.C como año cero (coincidiendo con la Hégira, la huida de Mahoma de la Meca), y ahora está en el año 1438 A.H. (anno hegirae).

Los calendarios lunares intentaban ajustarse al año astronómico solar de diferentes maneras, para que tanto las festividades como las estaciones no variaran de fecha. Es así como surge el concepto de calendario lunisolar.

Calendarios Lunisolares

Calendarios lunisolares importantes son el hebreo, el budista, el helénico, el babilonio, y cómo no, el chino.

El primer calendario chino data del 2637 a.C., y cada año consta de 353 a 355 días, distribuidos en 12 meses, añadiendo 1 mes más cada 3 años, resultando un año de entre 383 y 385 días. Es decir, para ajustarse al año solar, cada 19 años se distribuyen 7 meses.

Calendario Chino

Cada año corresponde con uno de los doce animales en el horóscopo chino, debido a que la astronomía oriental agrupa las estrellas en constelaciones diferentes a las occidentales. Se reparten en ciclos de 10 años: los 5 elementos (tierra, metal, fuego, agua y madera) en los que se dividen el yin (años impares) y el yang (años pares). Dan lugar a ciclos de 60 años al unirlos a los 12 animales del horóscopo, hasta que cada animal ha coincidido con cada uno de los elementos.

El ciclo actual comenzó en 1984 y terminará en 2044. éste año será el año del Perro, décimo primer animal del horóscopo.

Desde 1912, la República de China adopta el calendario gregoriano, haciéndose efectivo este hecho hacia 1929. Para la vida diaria y empresarial, no hay diferencia alguna con nuestro calendario. Sólo ciertas fechas, importantes por la tradición o la cultura popular, son elegidas entorno al calendario lunisolar chino. Algo similar a lo que ocurre con las fiestas religiosas occidentales; la Semana Santa, el Corpus Christi, o incluso Carnaval, coinciden con ciclos lunares, no solares.