El sarampión es una enfermedad infecciosa de curso agudo, similar a la rubeola y la varicela, que afecta principalmente a los niños. Es causada por un virus de la familia paramixoviridae del género Morbillivirus. La enfermedad se caracteriza por producir manchas de color rojo en la piel (erupción exantémica), fiebre y malestar general.
En algunos casos pueden ocurrir complicaciones tales como neumonía, diarreas, o encefalitis, pudiendo comprometer la vida del paciente. Esta es una enfermedad altamente contagiosa, de la cual la región de la Americas se encuentra libre desde el año 2016, sin embargo, desde mediados del año 2017 se han venido reportando casos importados en la región sur este de Venezuela, específicamente en el municipio Caroní del estado Bolívar.
Síntomas del sarampión
El primer síntoma del sarampión suele ser la fiebre alta, esta se inicia entre 10 y 12 días después de la infección y puede tener una duración de 4 a 7 días aproximadamente. La fiebre suele estar acompañada de coriza, conjuntivitis, unas pequeñas manchas blanquecinas en el interior de la mejillas, llamadas Manchas de Koplick, luego aparece la erupción exantémica en la cara, cuello, extendiéndose a las manos, pies y tronco.
Aunque la mortalidad es baja, esta suele estar asociada a la incidencia de las complicaciones, las cuales tienden a ser más frecuentes en niños menores de 5 años y en adultos mayores de 30 años. La malnutrición en niños es un factor predisponente para la severidad de la enfermedad, al punto que se ha descrito que en poblaciones con altos niveles de malnutrición, con marcadas deficiencias de vitamina A, la mortalidad por sarampión puede estar por encima del 5% de los caso.
Al sarampión se le atribuye ser una causa de aborto o parto prematuro en mujeres embarazadas
Prevención
La vacunación es la medida preventiva más eficaz y eficiente contra el sarampión. Todos los niños deben recibir la vacuna y los refuerzos correspondientes. Esta actividad en niños deber estar combinada con campañas de inmunización masiva en los países con una elevada tasa de incidencia.
En 2012, la Asamblea Mundial de la Salud aprobó el Plan de Acción Mundial sobre Vacunas con el propósito de eliminar el sarampión en cuatro regiones de la OMS para el 2015 y en cinco regiones para el año 2020. En el 2016, la suma de esfuerzos a nivel mundial para mejorar las coberturas vacunales, propició la reducción de las muertes en un 84%.
Entre 2000 y 2016, la vacunación contra el sarampión evitó una cifra estimada de 20,4 millones de muertes. En 2016, aproximadamente 119 millones de niños fueron vacunados contra el sarampión en campañas de vacunación en masa llevadas a cabo en 31 países. En la actualidad, todas las regiones de la OMS tienen objetivos establecidos para eliminar esta enfermedad prevenible para 2020 o antes de esa fecha.
El sarampión en la actualidad
A pesar de los esfuerzos realizados, según la OMS, el sarampión está volviendo a Europa, en vista de que en el año 2017; fueron reportados más de 21.000 casos de la enfermedad, en contraste con el mínimo histórico reportado en el año 2016 de apenas 5.273 casos. Pudieron detectar se brotes importantes en 15 de los 53 países de la región europea de la OMS, con el mayor número de casos en Rumania (5562), Italia (5006) y Ucrania (4767)”.
Seguidamente se encontraron por frecuencia de casos: Grecia (967), Alemania (927), Serbia (702), Tayikistán (649), Francia (520), Rusia (408), Bélgica (369), Reino Unido (282), Bulgaria (167), España (152), República Checa (146) y Suiza (105). La mortalidad registrada fue de 35 personas durante el año 2017.
Por otra parte, la Región de la Américas fue decretada Libre de Sarampión en el año 2016, sin embargo, a mediados del 2017 se presentó un brote de esta enfermedad, en la región sur de Venezuela, específicamente en el municipio Caroní del estado Bolívar, cuyo caso índice es una persona de nacionalidad extranjera, que ingresó al país durante el periodo de incubación de la enfermedad, por lo que se considera que el brote tuvo origen en un caso importado, lo cual pudo ser corroborado mediante pruebas de diagnóstico molecular.
Esta situación ha puesto en alerta a las autoridades sanitarias de la Región y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), dado que por normativa se requiere eliminar la circulación del virus y cerrar el brote en menos de un año desde la detección del primer caso, a fin de mantener la condición de zona libre de sarampión.