Una persona en Australia falleció, los funcionarios de salud afirman que la causa fue por comer semillas de granada congeladas que tenían alguna relación con un brote de hepatitis A. La mujer de 64 años fue la primera persona con el brote de esta enfermedad, y que actualmente se reportan 24 casos en las zonas cercanas, afirmo el sistema de salud publica del sur de Australia. Aunque el producto infectado fue retirado hace meses del mercado, las personas enfermas pueden tardar entre siete o más semanas en mostrar los primeros síntomas de la enfermedad dijo la asociación del sur de Australia
Características de una infección de hepatitis A
La hepatitis A es una infección hepática, que es cuando el hígado pierde la capacidad de funcionar normal y correctamente, es contagiosa, y según los ‘Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades’ de E.U.
el virus ataca y destruye las células hepáticas, dijo el Dr. Amesh Adalja, científico principal del Centro de Seguridad Sanitaria. La gran mayoría de las personas con hepatitis A solo tienen síntomas ligeros y se recuperan completamente de la infección sin sufrir daños duraderos en el hígado, dijo.
Pero una pequeña proporción de personas, alrededor de 1 de cada 250 personas con hepatitis A, desarrollan complicaciones potencialmente mortales debido a la infección, como la insuficiencia hepática, según el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido. Los individuos que mueren a causa de una infección de hepatitis A generalmente tienen un mal hepático subyacente, como una infección con el virus de la hepatitis B o C, o una enfermedad hepática alcohólica, que ya causó daño a su hígado.
"Si tienes hepatitis C y estás infectado con hepatitis A además de eso, eso podría provocar una infección mortal", dijo Adalja a Live Science. Sin embargo, no está claro si la mujer en Australia tenía una enfermedad hepática subyacente.
El daño hepático es fatal para el enfermo
Principalmente para el hígado es "uno de los órganos más vitales que tenemos", dijo Adalja.
Es responsable de muchas funciones, incluida la eliminación de toxinas del cuerpo y la fabricación de compuestos que ayudan a coagular la sangre. Debido a que las personas con enfermedad hepática subyacente tienen un mayor riesgo de complicaciones por la hepatitis A, es muy importante que se vacunen contra el virus de la hepatitis A, dijo Adalja.
Los síntomas de la infección por hepatitis A generalmente no aparecen hasta dos a seis semanas después de que una persona se ha infectado, e incluyen fiebre, fatiga, náuseas, vómitos, orina de color amarillo oscuro, dolor en las articulaciones e ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos), según el CDC.