Es común ver padres preocupados porque su hijo no habla, o porque su vocabulario es escaso o porque no le entiende lo que dice. Aprendamos como apoyarlo cuando articula su discurso y cuando debemos buscar ayuda

Primeros sonidos

Si bien desde que el niño nace comienza a emitir algunos sonidos, es a partir de los 6 meses cuando comienzan los balbuceos, sonidos que al inicio no se entienden y sin tener muy claro el significado de lo que dice, pero que poco a poco se van transformando en palabras entre los 12 y 24 meses.

Ya al cumplir los 2 años debería tener un vocabulario de al menos 50 palabras y se le debería entender la mitad de lo que dice.

De igual manera también a esa edad construye frases de dos palabras, mientras que a los 3 años ya combina por lo menos cuatro palabras y a partir de los 4 años construye oraciones completas y se le debe entender todo lo que dice. Claro no todos los Niños comienzan a hablar a la misma edad.

Niños de pocas palabras

A veces solemos escuchar que son niños de pocas palabras, o que es genético porque sus padres también hablaron tarde, y esto es un mito. Puede haber retraso en la pronunciación sobre todo de la letra “r” que se puede esperar ocurra tan tarde como a los 5 años, de resto si se observa un retraso en el lenguaje hay que buscar la causa.

Lo más común es que se deba una falta de estimulación, porque los adultos no hablan lo suficiente con el niño, y la interacción con otras personas es lo que más puede ayudar a desarrollar el lenguaje de los niños.Y a que el niño va aprendiendo todo de su entorno a medida que crece, algunas cosas por enseñanza, otras por instinto, otras por imitación, como el habla.

En ese caso existen muchas estrategias, desde lecturas y canciones desde el nacimiento, hasta la comunicación diaria en todo lo que se hace

¿Cuándo buscar ayuda?

Para evaluar los avances en el lenguaje se maneja los 2 años, y tiende a darse un margen de 3 meses, es decir, que si pasados los 2 años y 3 meses presenta retraso en el lenguaje se debe consultar al especialista.

Y si bien lo más común es que se deba a una falta de estimulación no hay que descartar causas auditivas o neurológicas, que de detectarse a tiempo se puede intervenir y evitar que avance el retraso.

De igual manera sí se implementan las medidas necesarias a tiempo, un niño sano puede lograr alcanzar el desarrollo del lenguaje que le corresponde. y este es un aspecto del desarrollo con el que conviene estar muy atento, pues puede luego derivar en problemas del aprendizaje.