En ocasiones he hablado del binomio actor/director, pero hay otro binomio también existente aunque menos conocido: el de actor/productor.

Esta combinación es por lógica la manera en que las estrellas tienen la oportunidad de protagonizar películas donde puedan lucirse a su gusto. Esto en sí conlleva un gran riesgo, ya que el egocentrismo puede arruinar dichos proyectos primando el lucimiento del actor de turno por encima de la calidad del film. Pero habría que matizar primero en explicar en estos casos que es producir. Dicho actor asumiría el rol de productor ejecutivo y su función principal es recaudar dinero para que el largometraje pueda financiarse aprovechando su fama.

Luego al conseguir esto, puede elegir el guión, el director y el reparto que le acompañará.

Esta fórmula ha sido utilizada muy bien por estrellas como Robert Redford, Warren Beatty o Clint Eastwood dando obras importantes en esa doble faceta como "Todos los hombres del presidente", "Shampoo" o "Un botín de 500.000 dólares" respectivamente. Curiosamente estos tres ejemplos se pasaron con el tiempo a dirección ganando sendos premios Oscar en esa faceta.

Tom Cruise superstar

Es el caso más sonado de los últimos tiempos. Desde Misión Imposible, en 1995, se ha encargado de supervisar en la producción gran parte de sus proyectos. De hecho una de las claves del éxito de esta película se debió al tremendo acierto de elegir a Brian De Palma como director y mostrar unas trepidantes secuencias tremendamente espectaculares al servicio de lo que se esperaba de ese film.

Sin embargo desavenencias personales entre Cruise y De Palma, hicieron que para la horrorosa secuela, se prescindiera de los servicios del director, contratando al hongkonés John Woo para alternar planos ridículos de escalada, motociclismo y palomas.

Luego produjo el remake de "Abre los ojos" de Alejandro Amenábar, "Vanilla Sky" previo a haberlo hecho con su película "Los otros" a mayor lucimiento de la que era su esposa entonces, Nicole Kidman.

La película dirigida por Cameron Crowe fue ofrecida al español quién con inteligencia rehusó a hacer una segunda versión. Y digo con inteligencia porque esta película padece muchos de los males que sufren las películas que produce y protagoniza Tom. Principalmente, que intenta dar credibilidad al papel de un jovencito y se nota demasiado su intención de lucirse en un largometraje en líneas generales bastante mediocre.

Esto le ha ocurrido en toda la saga de Ethan Hunt (Misión Imposible), en "El último samurái", como también en otros films donde pretende significarse como héroe de acción en los que hay que contemplarle con cariño ya que produce un poco de vergüenza ajena como en Jack Reacher.

Tom Cruise, un buen e infravalorado actor

Precisamente en el estreno en Madrid de esta película, tuve la oportunidad de verle de muy cerca y observar cómo se comportaba con todo el mundo. Es todo un ejemplo de buena educación, simpatía a raudales y excelente comportamiento en público. Tiene un carisma único que le ha convertido en una superestrella desde que era un jovencito en películas como "Risky Business", "Legend" , "Cocktail" o "Top Gun", que le hizo convertirse en el niño bonito de Hollywood.

Era el hombre más deseado de los 80' y a la vez nuestro ídolo, el espejo en el que los jóvenes nos mirábamos.

Luego fue demostrando que no sólo era una cara agradable, sino un buen actor. Por eso Martin Scorsese le convierte en el coprotagonista de "El color del dinero" junto a Paul Newman donde entusiasmó con ese papel de niñato genial y caprichoso. En "Rain Man" estaba a la altura de un mito como Dustin Hoffman y en "Nacido el 4 de julio" de Oliver Stone, encarnando a un veterano del guerra del Vietnam, simplemente lo borda.

En los 90', a parte de seguir construyendo su carrera a base de taquillazos como "Días de Trueno" o "Un horizonte muy lejano", también tiene tiempo para representar al vampiro Lestat en "Entrevista con el vampiro" de Neil Jordan y conseguir su primera y muy meritoria nominación por una película agradable como "Jerry McGuire".

Pero donde de verdad se vio su capacidad fue en 1999 donde el maestro Stanley Kubrick le elige para su gran obra póstuma "Eyes Wide Shut" donde es capaz de mostrar todas las debilidades y miedos de un triunfador, desnudando su interpretación ante el ojo clínico del buen Stanley.

Ese mismo año también efectúa su mejor trabajo frente a la cámara en "Magnolia" de Paul Thomas Anderson donde interpretaba genialmente a una especie de predicador sexual con un gran drama tras la máscara que ofrecía al público. Fue nominado al Oscar por segunda vez y sorprendentemente no se lo otorgaron. Luego hizo con Steven Spielberg la estupenda "Minority Report" y la fallida "La guerra de los mundos" donde tampoco destacó por grandes interpretaciones.

En ese momento se pensaba que se terminaría convirtiendo en un gran actor respetado, pero la poca solvencia a la hora de elegir proyectos tanto como actor como productor han terminado dilapidando el prestigio que poco a poco y con gran esfuerzo se había ido ganando. Habría que salvar de la quema "Collateral" de Michael Mann, donde por primera vez en su carrera encarnaba a un "malo", "Leones por corderos" de su idolatrado "Robert Redford" donde sostenía perfectamente un duelo interpretativo con Meryl Streep y "Valkyra" del desaprovechado Bryan Singer.

"La momia", más de lo mismo

Cruise está obsesionado por ser un héroe de acción en vez de un buen actor. Esa obsesión también la tiene con algo tan peligroso y extraño como la Cienciología.

Por estos motivos ha recibido bastantes burlas (quizás algo injustas) como que hicieron en South Park, donde el propio Tom se metía en el armario de uno de los protagonistas para luego no querer salir (metáfora poco sutil).

"La Momia" es una película en la que ya todo se ve venir desde el minuto uno. No supone una novedad respecto a nada y como film de acción tampoco entretiene. No se entiende cómo el bueno de Tom está empeñado en hacer una y otra vez estos subproductos. Y por supuesto tampoco se entiende cómo alguien con su poder en la industria, que ha demostrado su talento en más de una ocasión, no se arriesga en pos de un Cine que aporte a la historia del séptimo arte.