El principio 90/10 de Stephen Covey nos enseña a gestionar. Stephen Covey es un prominente empresario y autor estadounidense muy famoso por su obra "Los siete hábitos para tener éxito." Este principio puede cambiar positivamente nuestra vida, o al menos la forma en que tratamos los eventos. Descubramos cómo...
A lo largo de su vida se desarrolló el principio de que podemos jugar un papel decisivo en las consecuencias de lo que nos pasa, especialmente en las pequeñas cosas de la vida.
Es decir, podemos cambiar nuestras reacciones ante lo que nos ocurre y decidir si el día que vamos a vivir será un día "sí" o un día "no". Para explicar el principio 90/10, Stephen Covey utiliza un ejemplo muy claro y significativo: la típica situación en la que alguien,de repente, nos tira una taza de café encima.
Imagina que eres un hombre/mujer de negocios y tu hijo te tira la taza de café en toda la camisa. La reacción inmediata sería enfadarse, regañar al niño y culpar a nuestra pareja por haber puesto la taza demasiado cerca tuyo.
Este tipo de situaciones pueden hacer que el resto del día ya haga que estés de mal humor todo el día e incluso que te prepares para pensar que todo seguirá yendo igual de mal.
Es el ejemplo de una situación de la que no tenemos la culpa, pero de las que sí podríamos cambiar las reacciones.
No podemos evitar que la taza de café vuelque pero sin duda sí podemos reaccionar de manera diferente. Según el autor del principio 90/10, no deberíamos enfadarnos. Sólo cambiarnos de camisa y seguir el día con normalidad. No es el fin del mundo. Es importante mantener la calma para poder encontrar de inmediato una solución y continuar viviendo nuestro día como si nada hubiera sucedido.
Sólo si estamos tranquilos no perdemos el tiempo regañando y culpando a los demás haciendo que podamos llegar tarde al trabajo e incluso olvidarnos documentos por tener la cabeza en la discusión sin pensar en lo que realmente es importante.
Podemos cambiar la perspectiva sobre lo que nos pasa y reaccionar de manera diferente. Esto es especialmente importante para no empeorar la situación.
De hecho, debemos tratar de resolver la situación de inmediato, o al menos mejorarla. Esa es la clave.
El principio 90/10 de Stephen Covey nos da algunos consejos que podemos aplicar a nuestra vida cotidiana. Por ejemplo, tenemos que ser conscientes de que podemos determinar nuestro estado de ánimo con nuestras reacciones. Así que cuando ocurre algo negativo, podemos elegir actuar y reaccionar de una manera positiva.
En su opinión, cada reacción equivocada, por ejemplo la frustración excesiva en la cara de un comentario negativo, puede arruinar literalmente nuestros días y hacer que vayamos acumulando fracasos que se producirán una tras otro en todas las áreas: trabajo, familia, salud, amigos.
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Recordamos que nuestro estado de ánimo y nuestras reacciones a los eventos depende principalmente de nosotros. Podemos decidir dejar de considerarnos las víctimas del mundo, asumir la responsabilidad de nuestras acciones y ser conscientes de nuestras actitudes. Cambios tan simples y fáciles pueden hacer que nuestro día a día sea mejor y vivamos más felices.