Tras ganar el primer título de su historia en 2016, los lusos quieren volver a triunfar en un torneo europeo. Liderados por Cristiano Ronaldo, que destrozó a Suiza con sus tres tantos en las semifinales, se enfrentan a una Holanda comandada por los defensores Van Dijk y De Ligt.

En clara mejoría desde su ausencia en los dos últimos campeonatos de selecciones, el conjunto entrenado por Ronald Koeman ha sabido introducir la nueva hornada de talentos que ha despuntado esta temporada en el Ajax de Ámsterdam.

Así, De Jong es el líder del centro del campo y fue nombrado como el mejor jugador en el encuentro frente a Inglaterra, De Ligt anotó un tanto contra los británicos y se ha consolidado como uno de los grandes defensores del continente, mientras que Van De Beek fue vital con su equipo en la Champions League y espera acoplarse al once inicial.

La transición dulce en Portugal

Siendo un término acuñado por Vicente del Bosque haciendo referencia al complicado cambio generacional que debe hacerse para renovar a un equipo, es cierto que a Fernando Santos no le ha temblado el pulso a la hora de dar el relevo a clásicos del conjunto luso.

De esta manera, Nani y Éder, que fueron héroes en la Eurocopa 2016, ya se perdieron el Mundial de 2018 y no han sido convocados para la UEFA Nations League. Por otra parte, João Moutinho perdió la titularidad, mientras el técnico portugués hizo debutar a João Félix en el encuentro de semifinales frente a Suiza.

Por otra parte, Bernando Silva se ha consolidado como el líder en el centro del campo y dio una exhibición frente al combinado helvético, mientras que jugadores como Guedes o André Silva esperan su oportunidad para acompañar a Cristiano Ronaldo, el artífice de los éxitos de Portugal.

Sin Robben, Sneijder y Van Persie

Habiendo alcanzado la final en 2010 y logrado el tercer puesto en 2014, Holanda se resquebrajó gradualmente y faltó a la Eurocopa 2016 tras quedar cuarta en un grupo por detrás de Islandia, República Checa y Turquía.

Dos años después, quedó eliminada en la fase de clasificación para Rusia 2018, siendo superada por Francia y Suecia. Tras estos dos fracasos, jugadores como Van Persie, Robben y Sneijder se retiraron del conjunto nacional para dar paso a los jóvenes talentos que apuntaban maneras en las categorías inferiores.

Aun así, pocos esperaban que Holanda fuese a resurgir de manera tan rápida, pero fueron capaces de liderar un grupo integrado por Francia y Alemania para clasificarse a las semifinales de la UEFA Nations League.

Ahora, esperan obtener su primer título desde que ganasen la Eurocopa en 1988 con aquel gol inolvidable de Marco Van Basten frente a la URSS. Para ello, se encomiendan al liderazgo de Van Dijk, ganador de la Champions League con el Liverpool, a la calidad del próximo jugador del Barcelona, De Jong, y a la movilidad en ataque de un renacido Memphis Depay.