"Un hombre muy pero que muy viejo, que nació en el año de 1483, en el reinado de Eduardo IV, teniendo 152 años en 1635". Con estas palabras se describe en un retrato del Museo de Arte de Shrewsbury a Thomas Parr. La leyenda que se ha fraguado alrededor de este personaje ha provocado que sea más conocido como 'Old Parr' en el mundo anglosajón.

Según la leyenda, Thomas Parr vivió durante la coronación de 10 príncipes

Según la leyenda, Thomas Parr nació en 1483 en la localidad inglesa de Shrewsbury. Su longevidad, según aseguraba, se debía a la dieta extrema que tenía, consistente únicamente en leche, queso, pan duro y muy esporádicamente licor.

También decía que vivía tanto debido a que no tuvo preocupación alguna hasta que se casa con 80 años y por no mantener relaciones sexuales hasta los 100.

La historia de 'Old Parr' tuvo que ser muy famosa en su época, como atestiguan los retratos realizados por artistas de la talla de Rubens o Van Dyck. Afirmaba haber visto la coronación de 10 reyes, causando la sorpresa del propio rey inglés Carlos I, que no dudó en hacerlo llevar a su corte.

Cuando Thomas Parr llega a Londres es tomado como un espectáculo, aunque nunca le faltaría de nada. Sin embargo, el cambio alimenticio que sufrió durante su estancia en la ciudad londinense, provocó su muerte el 14 de noviembre de 1635, con la friolera de 152 años, siendo enterrado en la Abadía de Westminster.

Interrogantes sobre su verdadera edad

Varios investigadores a lo largo de la Historia han querido arrojar luz a la leyenda de Old Parr. Por ejemplo, William Harvey, descubridor de la circulación sanguínea, realizó una autopsia en el cuerpo del longevo hombre. Dictaminó que sus órganos estaban en perfecto estado y que habría fallecido por su avanzada edad y no por ninguna enfermedad.

Los análisis modernos de esta autopsia realizada por Harvey apuntan a que Parr no tendría más de 70 años.

Los investigadores creen que la creencias de su vida tan longeva se debe a una confusión histórica con otros personajes cuyo apellido era Parr. De hecho, en 1483 es cuando nace un Thomas Parr, padre de Catherine Parr, una de las esposas que tuvo Enrique VIII, justo cuando la leyenda asegura que nació Old Parr.

Tuviera o no muchos visos de realidad esta leyenda inglesa, lo cierto es que su historia está muy arraigada en la cultura popular inglesa. Muchas obras literarias y pictóricas han hablado sobre Thomas Parr, e incluso da nombre a una marca de whisky escocés.