La lluvia de estrellas Perseidas iluminará las madrugadas de agosto al llegar la mitad del mes. Desde el martes 11 de agosto, el cielo nocturno tendrá un espectáculo natural sin igual. Hasta 100 meteoros por hora podrán verse sin implementos especiales, una auténtica lluvia de estrellas que, cada año, maravilla a propios y extraños durante el mes de agosto en España y el resto del mundo.

Al entrar el cuarto menguante, la Luna será una estupenda aliada para disfrutar del espectáculo nocturno. Lo único que se necesita para ver las Perseidas es un cielo despejado, buen tiempo y algo de paciencia para esperar el momento justo en que los meteoros comiencen a rasgar la oscuridad de la noche.

Para profesionales y aficionados de la fotografía, este fenómeno es una auténtica Navidad.

Del 11 al 13 de agosto las Perseidas alcanzarán su máximo esplendor

Las noches del martes 11, miércoles 12 y jueves 13 de agosto serán las ideales para ver la mayor cantidad de Perseidas. Sin embargo, la lluvia de estrellas podrá verse hasta, aproximadamente, el 19 de agosto. La lluvia de meteoros o estrellas fugaces alcanza su punto máximo esplendor desde la medianoche hasta, aproximadamente, las 3 de la madrugada. Una zona boscosa o montañosa, lejos de la iluminación artificial de la ciudad, es la mejor opción para ver la mayor cantidad de Perseidas en el cielo.

El fenómeno propiamente dicho comienza desde finales de julio y se extiende hasta mediados de agosto, pero es durante el 11, 12 y 13 de agosto cuando la lluvia de estrellas alcanzará su máxima intensidad.

Ello ocurre por la fase lunar (cuarto menguante, este año), lo cual facilita la oscuridad del cielo nocturno, y porque durante dichos días la Tierra choca con la zona en donde hay más escombros espaciales dejados por la estela del cometa Swift-Tuttle.

Este cometa tiene un diámetro de 24 kilómetros. Al pasar en diagonal por la órbita terrestre, el cometa rasga la zona de escombros, con la Tierra muy próxima a la nube de polvo que representan los fragmentos dejados por el cometa.

En ese punto es posible observar cientos de meteoritos desintegrándose, dando lugar a la lluvia de estrellas conocida como Perseidas. La última vez que Swift-Turttle pasó cerca de la Tierra fue en 1992 y, el próximo encuentro de cuerpos celestes se dará, según la NASA, en 2126.

¿Por qué se le llama Perseidas a esta lluvia de estrellas?

Esta lluvia de meteoros se conoce como Perseidas porque, usualmente, las lluvias de estrellas emergen de la constelación de Perseo. En España y Latinoamérica, por su parte, el fenómeno es conocido como "Lágrimas de San Lorenzo, pues se da en una fecha muy cercana a la festividad conmemorativa de San Lorenzo, mártir español de la Iglesia católica (10 de agosto).

El fenómeno de las Perseidas fue identificado en 1835 por el astrónomo belga Adolphe Quetelet, quien advirtió que durante las primeras dos semanas de agosto era posible avistar con facilidad una lluvia de meteoros en las noches despejadas. En 2020, con el paso del cometa Swift-Turttle cerca de la órbita terrestre y la Luna en cuarto menguante, el fenómeno lucirá más espectacular a simple vista, pues será posible identificar mayor cantidad de meteoros rasgando la atmósfera.

¿Las Perseidas representan un riesgo para la Tierra en 2020?

Si bien el cometa Swift-Turttle pasará muy cerca de la Tierra, este no representa ningún riesgo para el planeta. De igual manera, la estela de polvo y partículas que deja tras su paso tampoco son riesgosas para la atmósfera terrestre. Aunque se trate de escombros, estos son realmente mínimos, del tamaño de un grano de arroz, según la BBC.

Al golpearse con la atmósfera, estos diminutos meteoros producen las estelas de luz que lucen, a simple vista, como estrellas fugaces. Sin embargo, en realidad no son estrellas, sino partículas de polvo que, al hacer combustión con la atmósfera, se transforman en halos incandescentes que rasgan el cielo nocturno por fracciones de segundo.

Por ello, vale la pena tener listo el lente de una buena cámara, ligar un cielo despejado, ubicarse en un sitio alejado de la contaminación lumínica y armarse de paciencia para capturar esta lluvia de meteoros la cual, pese a producirse cada año, solo hasta 2126 podrá verse con tanta nitidez. Sin duda, se trata de un fenómeno natural muy especial, ideal para quienes se encuentren resguardados en sus casas por la pandemia del coronavirus.