Los desplazamientos por carretera aún se contarán por millones estos días. Las vacaciones de Semana Santa, las visitas a diferentes pueblos y ciudades, el seguimiento de las procesiones y celebraciones, da como resultado un escenario de movilización ante el que es preciso estar preparado.

Ya no solo pensamos en la necesidad de saber lo mínimo de primeros auxilios o en el control de las emociones ante un desastre vial, pero sí vale la pena pararse a asimilar estos sencillos infinitivos antes de salir de casa.

La conducta PAS

Aprenderlos no cuesta nada y asimilarlos en frío nos ayudará a saber qué hacer en caso de Accidente. Las 3 letras son las siglas de lo que debemos hacer:

- Proteger

- Avisar

- Socorrer

Junto a estas siglas, está bien saber lo que es la "hora de oro". El concepto se basa en el siguiente dato: que, en la primera hora, tras el accidente, es cuando se produce el 75% de las muertes. Todavía más: los 5 primeros minutos contabilizan entre el 30 y 50% de las mismas. En conclusión, actuar rápido y bien, en los minutos siguientes a un accidente, es importantísimo y salva vidas.

Proteger

Una vez veas un accidente, y que no hay personas ayudando, toma todas las precauciones.

Recuerda que hay que ayudar, pero también evitar un segundo accidente. Es decir, se protege la zona y personas accidentadas, también a los que se paran a socorrer.

Señaliza: tu presencia mediante un chaleco reflectante, el lugar con triángulos de advertencia. Desde que ves el accidente, con las luces intermitentes del coche.

Toma todas las precauciones posibles, adaptándote a las circunstancias y al tipo de vía.

Avisar

Avisa al 112 tan pronto puedas.

Describe el escenario, la situación geográfica y el estado de los posibles heridos. Sigue las indicaciones de los profesionales.

Si puedes, advierte a otros conductores para cooperar. Si alguno de los accidentados puede andar, retíralo a lugar seguro.

Socorrer

Una vez localizado y señalizado el lugar, tras hablar con los servicios de emergencias, ocúpate de los aciidentados, siempre según sepas y puedas. Las heridas y los problemas respiratorios son lo normal en los primeros minutos. Ocúpate primero de los conscientes y de cuantos puedan moverse, alejándoles de la zona.

Salvo peligro, no saques a nadie de un vehículo accidentado ni manipules heridos con movimientos bruscos o le quites el casco a un motorista. Tampoco les des agua a beber. Acompañar, taponar hemorragias, practicar la reanimación (si sabes cómo), son las mejores acciones en este momento. Tu presencia infundirá ánimos y cierta calma, mientras llegan los profesionales.

Ante todo, mucha calma

Colabora en la medida de tus posibilidades y conocimientos, poniendo rápidamente en conocimiento de emergencias el estado y lugar del siniestro. Serás de gran ayuda.

Cómo no, si vas a tomar el coche estos días, revisa su estado, conduce con tiempo y calma. Estarás evitando accidentes y colaborando en la fluidez del tráfico y la tranquilidad de los conductores.