Cada vez que viajas a un país nuevo, puedes sentir un torbellino de emociones. Estos sentimientos inundan tu mente y no tomas en cuenta cosas importantes para tu viaje. No hablamos de cosas materiales, sino de aquellas que pueden evitar que ofendas a los nativos del lugar que vas a visitar.

No tomar en cuenta la religión y las sensibilidades culturales

Ser sensibles es mucho más importante que sacarte una buena foto para tus redes sociales. A veces, el atuendo que se verá más lindo en tu Instagram no es necesariamente el más apropiado para el lugar que estás visitando.

En muchos sitios históricos y religiosos exigen un código de vestimenta y este debe ser respetado, sin importar que estés de vacaciones y después de allí te vayas a disfrutar de una playa. No acatar ese tipo de reglas resulta grosero y más cuando hay carteles que te indica el código que tienes que seguir. La religión y las prácticas culturales de un país son mucho más importantes que ganar miles de “me gusta” en tu foto.

Regatear demasiado cuando compras en los mercados locales

No insultes a los vendedores negociando demasiado y menos si vas a un mercado artesanal. Esas personas trabajaron mucho para obtener el producto que tú quieres comprar, aunque, sabemos que muchos artículos tienen un precio sobrevalorado, porque los turistas no saben bien cuál sería el precio ideal, porque no son de la zona.

Pedir un precio exageradamente bajo es una verdadera falta de respeto y desvaloriza el esfuerzo de los comerciantes. Al igual que a ti te gustaría recibir un pago justo por tus servicios en el trabajo, aquellos que trabajan en los mercados locales esperan lo mismo.

Hacer comentarios negativos del país

Hay algunas cosas que te las tienes que guardar para ti o para los tuyos y decirlas después, cuando llegues a tu país.

Hay lugares que no son tan buenos como tú esperabas que lo fueran, pero no por eso se tienen que hacer comentarios poco positivos a los nativos del sitio. Ese es un acto de mala educación. Si sabes que tu destino no es el país más rico del mundo, ya deberías saber qué esperar. Mucha de está gente hace un gran esfuerzo para que puedas recibir una buena atención, pero sus ganas llegan hasta donde les alcance sus recursos.

Nuestro consejo es que a menos que estés cerca de personas que conoces, evita hacer comentarios negativos sobre tu experiencia.

Ser ignorante de la cultura de un país

Intentar apreciar cómo viven los locales no te haría mal. Hay cosas que no descubrirás sobre un país hasta que llegues allí, incluso con toda la información del mundo que hayas podido encontrar en Internet.

Hay locales que se sienten muy ofendidos cuando metes a todos en el mismo saco. Por ejemplo, si vas a un sitio que es famoso por sus playas, eso no significa que todas las personas de ese lugar vivan en el mar tomando refrigerios; o si es un lugar selvático, que los lugareños sean primitivos y vivan en casas de árboles. Siempre hay algo más de aquello que te ofrece un paquete turístico.