El escándalo está más que servido desde que se supo el robo de datos masivos que la empresa británica, Cambridge Analytica, realizó para la campaña electoral del actual presidente norteamericano, Donald Trump. En total habrían conseguido de forma ilegal los datos de más de 50 millones de personas, lo que ha hecho saltar las alarmas de todos los gobiernos así como de una parte importante de la población.

Aquí podrás informarte mejor de lo sucedido.

Una confesión

Christopher Wyle, el cofundador de la empresa de tan solo 28 años de edad, ha sido el primero en dar la cara para contar la verdad sobre el robo de datos a los diarios The New York Times y de The Observer, así como a la cadena CBSnews.

Él asegura que "si se unen las piezas de información adecuadas, se puede obtener un retrato digital de quien eres tú". También mencionó que no solo trabajaron para Trump, si no que también lo hicieron para su rival Ted Cruz, en la campaña de 2016. La empresa fue financiada por varios miembros del partido republicano, quienes contrataron los servicios de Cambridge Analytica por un valor aproximado de 6 millones de dólares, a los que se les suma otro millón de dólares por la compra de los datos robados.

Pero, ¿cómo lo hicieron?

El robo de datos se realizó de forma discreta a través de una aplicación que se descargaron unos 270.000 usuarios. Dicha aplicación aseguraba servir al ámbito científico, serviría para que el usuario pudiera obtener un perfil psicológico de sí mismo.

La consultora contactó con un profesor de la reputada Universidad de Cambridge, Aleksandr Kogan, para que avalase el desarrollo de la aplicación en 2014 y, en poco tiempo, obtuvieron los perfiles de 270.000 usuarios registrados que lo hicieron a través de sus perfiles de Facebook. Al principio pagaron entre 2 y 3 dólares a los usuarios que se registraban para rellenar los formularios, pero muchos otros también lo hicieron gratis.

De esta forma consiguieron hacerse con la lista de amigos de todos esos usuarios así como con sus datos personales, algo para lo que no estaban autorizados y para lo que ningún usuario dio su permiso.

Wyle ha calificado esos datos como "oro político", ya que fueron los que ayudaron a Trump a ganar la presidencia.

Facebook por su parte asegura que la obtención de los datos no tuvo su consentimiento, por lo que se hizo a espaldas del gigante digital.

También han asegurado que desde el año 2015 han estado eliminando a todos aquellos desarrolladores que han estado utilizando aplicaciones para obtener información sobre las listas de amigos. La situación ha llegado a ser tal que incluso un fundador de WhatsApp, Brian Acton, está apoyando la eliminación de los perfiles de Facebook.