La policía de Costa Rica pudo determinar con certeza la culpabilidad del sospechoso del asesinato de la turista española Arantxa Gutiérrez. La confirmación de las sospechas se dio tras obtener los resultados de las pruebas de ADN practicadas como parte de la investigación.

Gutiérrez fue violada y asesinada durante la mañana del pasado 4 de agosto en la caribeña playa Tortuguero de la nación centroamericana. Las autoridades presumen que la joven Arantxa Gutiérrez fue atacada mientras paseaba sola; fue abusada sexualmente y luego asesinada por asfixia mecánica tal como lo indica la autopsia.

Resultados irrefutables

Los investigadores detectaron coincidencias irrefutables entre el ADN encontrado en la víctima y el correspondiente al hombre que fuera detenido algunas horas después de los hechos. Estas pruebas son suficientes para que el Ministerio Público de Costa Rica, solicite a los tribunales una sentencia por este caso contra el imputado, quien hasta la fecha se encuentra detenido por motivos migratorios.

Las pruebas de laboratorio permitieron al Organismo de Investigación Judicial, confirmar la participación del sospechoso en el crimen contra Gutiérrez. Walter Espinoza, director del cuerpo de investigación aseguró que “Ya no hay hipótesis”. El experto dijo que según la investigación adelantada por ese organismo “es claro y contundente” que el sujeto detenido fue el asesino de la joven turista en playa Tortuguero.

Detalló Espinoza que los forenses realizaron una comparación de la saliva del detenido con la que aislaron del cuerpo de la Mujer.

Tras la evaluación molecular de las muestras, se detectaron coincidencias entre el ADN del sospechoso y el material biológico (resto de piel) encontrado en las uñas de la víctima. Además, esto es compatible con las lesiones por rasguños evidenciadas en el cuerpo del agresor, lo cual sugiere que la joven trató de defenderse.

A la luz de los resultados obtenidos, no queda ninguna duda de que el sujeto tuvo “contacto” con el cuerpo de la víctima. Solo falta evaluar otras muestras, para corroborar la secuencia de los hechos con todo el respaldo científico que puede ofrecer el Laboratorio Forense de Costa Rica. Así lo dio a conocer Espinoza en rueda de prensa.

El imputado de apellido Díaz

Se trata de un inmigrante indocumentado de 33 años de edad, de apellido Díaz y nacionalidad nicaraguense, quien por su situación y la falta de pruebas contundentes, en primera instancia fue entregado a la dirección de Migración. No obstante, ante los últimos resultados, el Ministerio Público otorgará las pruebas al Tribunal en una audiencia pautada para esta semana, con el objetivo de encarcelar a Díaz por los delitos contra Gutiérrez.

Hasta el día lunes el imputado permanecía recluido en un centro de detención migratoria en la ciudad de San José, a la espera de los trámites para su deportación a Nicaragua. Sin embargo, las autoridades de Costa Rica prometieron trabajar sin descanso para evitar que este crimen quede impune.