Afortunadamente hay muchas personas en el mundo que no piensan como Donald Trump. Y no solo eso, sino que hay mucha gente buscando soluciones a los grandes problemas que acucian al planeta. El del cambio climático es, pese a la controversia, uno de los más importantes y el medioambientalista Paul Hawken lleva muchos años dando pautas que puedan marcar la diferencia.

Paul Hawken: Conocido activista medioambiental

Desde 1983 se dedica a dar conferencias por todo el mundo, es consultado por diversos gobiernos y corporaciones a nivel global sobre temas de desarrollo económico, Ecología industrial y especialmente política medioambiental.

Su idea es que es posible cambiar el mundo, pero para ello los individuos deben concienciarse y cambiar como personas, asegurándose de ser útiles a la Sociedad.

Hawken escribe artículos en periódicos como el Wall Street Journal, el Whashintong Post o Newsweeks y en revistas especializadas como la Harvard Business Review. Es autor de siete libros, cuatro de los cuales han sido bestsellers, incluso Bill Clinton dijo de la obra que escribió junto a Amory LovinsCapitalismo Natural” que era uno de los cinco libros más importantes del mundo.

100 soluciones efectivas contra el cambio climático

Ahora acaba de publicar el libro “Drawdown: el plan más completo jamás propuesto para revertir el cambio climático”, se trata de la conclusión a una investigación que tiene su origen en el año 2001.

En solo unas semanas se ha colocado en la lista de los libros más vendidos en los EE.UU. “Drawdow” puede traducirse al castellano como reducción, y eso es lo que pretenden el libro y la asociación que ha surgido de este estudio, reducir las emisiones responsables de la elevación de la temperatura del planeta.

Hawken consiguió reunir a un nutrido grupo de especialistas en diversas materias: investigadores, científicos, estudiantes graduados, doctorados, postdoctorados, políticos, líderes empresariales y activistas con el fin de estudiar las mejores acciones para revertir el cambio climático en el menor tiempo posible.

Lejos de buscar el Santo Grial, es decir, esa solución única e ideal que borre de un plumazo todos los problemas, el libro propone 100 soluciones prácticas basadas en una meticulosa investigación, clasificadas en función a su impacto potencial de carbono (calculado hasta el año 2050), cada una con estimaciones aproximadas de los costos y una breve descripción una manera eficaz de luchar contra el calentamiento global.

Son soluciones que tienen un impacto muy positivo, pues no han sido elegidas solo por su impacto benéfico sobre el medio ambiente sino porque con ellas se mejora la vida en general, se crean puestos de trabajo, se mejora la seguridad, y además ayudan a generar resiliencia y promueven la salud humana.

Además del libro, el proyecto cuenta con una página web que pueden consultar todos los interesados. En ella se enumeran todas las soluciones, que van desde la evidente necesidad de trabajar por una repoblación forestal, la creación de compost y el uso de la energía solar concentrada. A otras medidas quizás menos evidentes como la educación de las niñas en los países menos desarrollados y la potenciación de la planificación familiar que podrían suponer una reducción de 120 gigatoneladas de CO2 en 2050.

Así mismo, investigan soluciones de elementos que aún están en vías de investigación como los coches autónomos, las hojas artificiales o la modernización de los aviones que actualmente emiten entre un 2 y un 3% del total del dióxido de carbono a la atmósfera.

Y algunas otras que aunque nos recuerdan a películas de ciencia ficción, ya están en marcha, como la de repoblar la estepa del mamut. Se trata de una inmensa llanura de región subártica, que abarcaba desde Alaska hasta Rusia, pasando por Canadá y Europa que los humanos hemos arrasado con el “triunfo” de nuestra civilización. Los científicos Sergey Zimof y Alexander Sergeev están iniciando el Parque del Pleistoceno, que de momento es un área cerrada de 16 kilómetros cuadrados que alberga a 5 principales especies de herbívoros bisonte, bueyes almizcleros, alces, renos y caballos que poblaban esta área originariamente (los mamuts se han extinguido) y a sus depredadores los lobos.