Recientemente un periodista se quejaba de ser tildado de "racista" e "islamofóbico" porque criticaba el islam, mientras que "a los que niegan a Dios se les dice simplemente "ateos" y terminaba su artículo diciendo: "Si el respeto hacia el Islam es mandatorio, exijo el mismo trato para el cristianismo" y no se hizo esperar el aluvión de respuestas defensivas y es que las redes sociales han despertado una clara tendencia hacia el ateísmo que al decir de muchos "se ha puesto de moda" y sus detractores comienzan a calificar como: "fundamentalismo ateo".
Los investigadores de la Universidad de Tennesse Christopher Silver y Thomas Coleman, luego de un amplio estudio concluyeron que existen seis tipos:
Ateos intelectuales: Buscan continuamente información y estimulación intelectual sobre el ateísmo. Van en pos del debate preferentemente en Internet y adoptan como íconos las figuras de Albert Einstein y Stephen Hawking venerándolos como sus "dioses". Se caracterizan por una postura de intolerancia intelectual. Son versados en libros y artículos sobre religión, ciencias y ateísmo. Su fundamento es científico.
Activistas ateos: No les basta con no creer en Dios sino que tratan de convencer a la sociedad de lo bien que estaría el mundo sin religiones de ningún tipo.
Asumen posturas políticas y abrazan todo aquello que esté en contra de los postulados de la Iglesia, es decir son antihomofóbicos, proabortos, aprueban la Eutanasia y la legalización de la marihuana. Culpan a la Iglesia de la pobreza y la ignorancia mundial. Su fundamento es social.
Agnósticos buscadores: Dudan de la existencia de Dios pero reconocen las limitaciones del conocimiento humano, generalmente tratan de encontrar alternativas en el budismo u otras filosofías. No significa que estén confundidos sino que abrazan la incertidumbre. Su fundamento es espiritual.
Ateos beligerantes: Manifiestan una oposición abiertamente intolerante posicionándose dialmetralmente a todo lo que provenga de las creencias con actitud hostil de desprecio, de odio y calificando todo lo religioso como ignorancia.
Atacan por igual a todas las religiones: yorubas, islamismo, judaísmo, hinduísmo y budismo además del cristianismo. Están en contra de las celebraciones de origen religioso incluido "San Valentín". Su objetivo de ataque es la cúpula y líderes religiosos. Su fundamento es político.
No teístas: No creen en Dios pero la religión no juega ningún papel en su cosmovisión, ni les interesa integrarse a los movimientos ateos.
Ateos ritualistas: No creen en Dios, pero se adhieren a las enseñanzas rituales de algunas manifestaciones religiosas. Las entienden como tradiciones y pueden participar de sus festividades como algo puramente simbólico.
De acuerdo al artículo de Coleman y Silver es "una comunidad ontológica" que significa: abstracta y sin patrones.
Silver declaró al sitio Raw Story, "en 30 años podrían llegar a 32 tipos", considerando que se viene incrementando las deserciones de otras religiones del mundo.
Tema aparte merece el "ateísmo de closet" que comprende a los que por razones políticas, sociales, laborales o familiares prefieren reservarse sus opiniones respecto a la existencia de Dios.
Y aunque se trata de esgrimir la palabra tolerancia, esto se hace difícil cuando entran en contexto otras palabras como "inquisición" y otros 37 métodos de tortura practicados por la Iglesia católica en la antigüedad.