A Géminis muchas veces no se le toma en serio porque su niño interno aparece a menudo, pero la verdad es que es una persona muy creativa y que se dedica a su trabajo de manera muy profesional y responsable. A la vez necesita hacer siempre algo diferente y cambiar de ambiente y de tarea para poder funcionar al 100 por ciento.
En el Horóscopo de Latinoamérica Géminis representa la dualidad, eso se refleja en su carácter: por un lado es un niño juguetón, el alma de la fiesta, el que siempre ríe y que necesita mucho cariño, pero en el aspecto laboral se impone con sus criterios acertados, su cultura y sus conocimientos de todo lo que hace.
Aunque Géminis parece una persona confiable por lo amistoso y cercano que es a la gente que le rodea, suele hacer uso de la mentira para lograr sus objetivos, ese es su aspecto negativo, no le importa a quien se lleva por delante ni de qué tamaño es la mentira que debe decir.
Géminis suele confundir la realidad con la ficción cuando de contar una historia se trata, él exagera, cambia los hechos, inventa los escenarios de una manera tan creativa que parece sacada de un cuento de hadas.
Debido a estas mentiras, es difícil para el Géminis tener una pareja estable porque tarde o temprano descubre quien realmente es él, una persona algo egoísta quien no se toma las relaciones amorosas muy en serio.
Le gusta la variedad y el cambio por eso sus noviazgos son cortos y termina dejando muchos corazones rotos en el camino.
Pero cuando Géminis consigue a esa persona que lo saca de la rutina y le pinta de rosa la vida, lo enamora de tal manera que se dedica a ella y a su hogar con total entrega y no sólo se preocupa por la seguridad emocional de su pareja e hijos sino que piensa mucho en la estabilidad económica y los riesgos del fututo.
En el horóscopo de Latinoamérica, Géminis es el signo a quien no le falta un seguro de vida, de accidentes, de incendio y de todo cuanto haya que asegurar porque ese niño que lleva dentro le teme a los contratiempos de la vida y prefiere sentirse más seguro con ese respaldo.
Esa seguridad que demuestra Géminis cuando ríe, cuando habla, cuando trabaja y hasta cuando da consejos y direcciones, es sólo una fachada que cubre todas las inseguridades de su personalidad y su niño interior.
Es el reflejo de su doble personalidad.
Por eso no es extraño que se le considere a Géminis el signo del zodíaco bipolar: es niño, adulto, profesional responsable, inseguro y temeroso también. Es alegre, chistoso, bailarín, pero llora y sufre en silencio por lo que desea lograr o por sus miedos y temores.