Últimos tiempos se ha visto un gran cambio en la cultura del baño rápido y se ha retornado al baño de inmersión. Basta ver la cantidad de nuevos productos inspirados en los spa para saber que el baño es otra vez protagonista. Hasta hace poco veíamos el baño como un lujo raro, pero ahora la gente se ha dado cuenta de que media hora en la bañera es mucho más que una forma de desconectar.
Los beneficios mentales y físicos pueden igualar los resultados de un tratamiento de spa... con la ventaja de que es gratis. Al igual que el simple placer de sumergir los pies en agua tibia, se ha probado que una inmersión en la bañera tiene excelentes efectos, cómo mejorar el sueño, aliviar el estrés y hasta reducir la celulitis.
Este es el ritual de belleza más fácil y efectivo ¡Llegó la hora de llenar la bañera!
Es bueno para el cuerpo
Sumergirse en el agua caliente para que transpires y liberes toxinas a través de la piel. Un baño así también aumenta el flujo de sangre hacia tus músculos, reduce la inflamación, alivia los dolores e incrementa la flexibilidad. Es perfecto para suavizar los miembros adoloridos o relajarte antes de un masaje.
El potasio natural de las sales de baño minerales regula la retención de líquido y aumenta la circulación, y te hará sentirte más animada y tonificada. También se ha mostrado que los baños son tan efectivos como las píldoras para dormir si padeces de insomnio. 10 minutos en el agua tibia bastarán para que la temperatura de tu cuerpo suba al nivel ideal para caer rendida.
Y para el alma
La sensación del agua contra tu cuerpo te llevará a una relajación profunda, Y la cálida temperatura te haga respirar hondo, reducirá el ritmo de tu corazón y aliviará tu ansiedad. Se dice que el baño absorbe la negatividad, literalmente, y se la lleva por el desagüe; por eso puede ser tan sanador y restaurador.
¿Y sabes por qué son tan adictivos? Porque te transportan a cuando estabas en el útero materno, donde el 70% era agua. El agua tibia estimula los sentimientos de seguridad, abrigo y familiaridad. Es como la calidez de una manta.
Antes del baño
Prepara la bañera: Usa una almohada de baño para mayor comunidad, o enrolla una suave toalla y ponla bajo la nuca.
Las luces bajas, tipo spa, también contribuyen a crear un ambiente de cálida relajación.
Crea un baño de vapor: Abre el grifo del agua caliente durante 5 minutos y cierra la puerta, llenar el cuarto de vapor hará que el cuerpo se relaje.
Enciende las velas: Pero es mejor comprar una buena vela de aromaterapia que 6 que no huelen a nada. Alcanza el éxtasis con las fragancias que más te gustan, o altérnalas según tu estado de ánimo.
Después del baño
Date una ducha rápida: Una ducha de agua fría ayuda a retener el calor porque cierra tus poros y evita que sudes.
Huméctate: Aplícate una loción corporal al salir del baño para sellar la humedad de la piel y aplícala dando un masaje hacia el corazón para aumentar la circulación y el drenaje linfático.
Descansa: Lo ideal es ir directo a la cama. Sino, quédate envuelta en la toalla 10 minutos y respira.