¿Sabes que el pasado 27 de marzo la Viagra cumplió 20 años? Sin embargo, este no es el único motivo por el que la popular pastilla azul es noticia en estos días. La revista Science Daily acaba de publicar un estudio, realizado por la Universidad de Augusta, en el que se demuestra que una ingesta diaria, a pequeñas dosis, de Viagra consigue hacer descender a la mitad el riesgo de padecer cáncer de colon, que recordemos encabeza el ranking de los 3 tipos de cáncer más mortíferos en todo el mundo.
Lideró una revolución
En opinión de Louis Kavoussi, director del Servicio de Urología del Northwell Health Group, la Viagra supuso un impacto similar al del antiobiótico para combatir las infecciones o al de las estatinas en el caso de las enfermedades cardíacas.
¿Sabías que este fármaco a base de sildenafilo de los laboratorios Pfizer nació para tratar la hipertensión arterial y la angina de pecho? Más allá de su utilidad para revertir la impotencia, dando carta de naturaleza a la disfunción eréctil, representó una auténtica explosión sexual para el género masculino. Las mujeres parecían quedar fuera, a la espera de un fármaco análogo para sus disfunciones o para la falta de líbido.
En este sentido, en 2015 la FDA aprobó un medicamento, Addyi, compuesto por flibanserina y al que se le bautizó como "el viagra femenino". No obstante, al pertencer a la familia de los antidrepesivos generaba numerosos efectos secundarios (náuseas, vómitos, pensamientos suicidas...) y dejó de dispensarse.
Las mujeres que deseen dar salida a los trastornos de este tipo pueden optar por la suplementación hormonal o por tratamientos, más innovadores, en los que el láser es el gran protagonista.
¿Conoces sus efectos secundarios?
Sus beneficios son notables, pero ¿cuáles son los efectos colaterales de una administración continuada de Viagra?
Lo cierto es que desde 1998, año de su comercialización, hasta la actualidad ha evolucionado mucho. De hecho, hoy podemos adquirir una variante genérica que ha contribuido, obviamente, a abaratar bastante su precio.
Siempre que no se tengan alteraciones en la coagulación de la sangre, la pastilla azul es un fármaco seguro con pocos efectos secundarios.
Los más habituales son el dolor de cabeza o el enrojecimiento. En casos menos frecuentes pueden aparecer las palpitaciones, mareos, indigestión o la visión borrosa. Eso sí, si la erección sobrepasa las 6 horas es necesario acudir de urgencia al servicio médico.