Cuando a la vuelta de las vacaciones de Semana Santa se hacía mención de los cortes en las principales carreteras catalanas y de un levantamiento de barreras en el peaje de acceso a la ciudad Condal, ya se sospechaba que detrás de estos actos estaban los CDR.

La detención, este martes, de la mujer española acusada de integrar una de estas organizaciones ha revelado algunos detalles hasta ahora desconocidos.

Según ha trascendido, la joven grababa mensajes que luego difundía a través de redes sociales en los que daba las directrices a seguir. Uno de ellos hace referencia a la jornada de protesta organizada por los Comités para la Defensa de la República para el 26 de marzo. El día siguiente al de la detención de Carles Puigdemont en Alemania.

La intención que transmitía en estos audios era la de "bullir la olla" para poder justificar una huelga general. Algunas de las acciones que también tenían previstas era la de sabotear conexiones ferroviarias e intervenir la mercancía. En el comunicado, la mujer, pedía que fuera sin violencia y tratando de que la policía no los detuviera. En el mismo pedía guardar fuerzas para "lo gordo", que era la huelga general.

Se estima que existen unos 400 CDR surgieron, casi a la par, que el referéndum del 1-O.