España no permitirá que Carles Puigdemont vuelva a ser presidente. Esto es lo que el depuesto vicepresidente catalán y líder de Esquerra (ERC), Oriol Junqueras, dijo desde la cárcel en una entrevista a una televisión privada española. "España nunca permitirá que la presidencia de Puigdemont sea efectiva, éste es el problema", respondió por escrito desde la cárcel. Los partidarios de la independencia están trabajando actualmente para restablecer a Puigdemont, el líder de la candidatura de Junts per Catalunya (JxCat). Sin embargo, el gobierno español está desafiando su oferta, y el Tribunal Constitucional aún debe decidir sobre su nominación como candidato para el puesto.

Junqueras no descarta ser el nuevo presidente, incluso cuando está encarcelado, pero cree que la principal prioridad para el país es formar un nuevo gobierno. "Hasta donde sé, no he perdido mis derechos, así que estoy seguro de que soy un candidato válido, pero no me corresponde a mí decidirlo", escribió Junqueras. "La prioridad es formar un gobierno, siempre he estado preparado para cualquier sacrificio necesario para un beneficio común". Madrid ha prometido que un nuevo ejecutivo catalán conducirá al fin de la suspensión de la autonomía, pero un parlamentario necesita ser nombrado presidente de antemano.

El vicepresidente del último gabinete de Puigdemont ha estado detenido por más de 100 días.

En cuanto a su situación de encarcelamiento, tiene pocas esperanzas de ser liberado pronto. También expresó que los últimos decretos del juez fueron "políticos y dejan poco espacio para una defensa jurídica". El Tribunal Supremo español ha actuado con escepticismo respecto a los líderes independentistas encarcelados que aceptan las medidas de Madrid contra el autogobierno de Cataluña.

Sin embargo, Junqueras argumenta en la carta que la aceptación del artículo 155 por parte de los líderes catalanes es obvia. "Todos aceptamos tomar parte en una elección celebrada en virtud de esta medida, y nadie permaneció en el gobierno catalán después de ser destituido", dijo.

"Guerras de fratricidio"

El lunes, los partidos a favor de un estado catalán continuaron sus negociaciones sobre quién debería ser el próximo presidente.

Sin embargo, Catalunya en Comú-Podem (CatECP), entre los bloques independentistas y unionistas, criticó que ERC y JxCat mantengan al país "sentado en alfileres y agujas debido a sus guerras de fratricidio". La prioridad de CatECP es formar un gobierno para " detener "los ataques del gobierno español". Uno de sus funcionarios dijo que los dos partidos independentistas de izquierda, ERC y CUP, deberían encontrar una alternativa a Puigdemont.

"Parálisis" política

Mientras que el Tribunal Constitucional español decide sobre la oferta de Puigdemont y los partidos proindependentistas mantienen conversaciones, el presidente del Parlamento catalán no convoca un nuevo debate de investidura, después de la primera prórroga.

Los Socialistas (PSC) le enviaron una carta el lunes pidiéndole que mantenga una nueva ronda de conversaciones con todas las partes para poner fin a la "parálisis" política en el país. El PSC también alega que Puigdemont no puede ser reintegrado porque no asistió a una audiencia en la Audiencia Nacional española el 2 de noviembre, a pesar de su solicitud de que se le permita testificar a través de un vídeo.