José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid, ha decidido apoyar a Pablo Casado en el discurso de que “en la democracia de Pablo Iglesias no entran todos”. Parece asimismo asumir el papel de defensor de la “democracia plena” que pretende aislar al vicepresidente segundo de Gobierno. Y es que Martínez-Almeida pretende dejar a Iglesias como una figura con desaciertos y perjudicial para el sistema español con frases, como "en el país no hay presos políticos" que constituye un intento por marcar terreno al mismo presidente del Gobierno, para que defina su postura al respecto.
El alcalde de Madrid critica también al presidente del Gobierno, y es que para el popular, Pedro Sánchez oculta los errores en su gestión con la presencia de un vicepresidente segundo como Pablo Iglesias. Una estrategia la de Almeida para provocar una respuesta por parte del Ejecutivo, porque de acuerdo al dirigente popular solamente al presidente del Gobierno le "conviene tener a alguien como Iglesias en la Moncloa". El PP de esa forma afina su ataque a Iglesias porque el enemigo es claro, el Partido Popular va a por Iglesias, para luego ir a por el PSOE.
El alcalde de Madrid quiere mostrar a Iglesias como un individuo poco informado
El dirigente popular y alcalde de Madrid avanza en su estrategia para cercar a Iglesias, diciendo que en España "no hay presos políticos". Martínez-Almeida ha traído a colación palabras de Pedro Sánchez en el pasado, en donde el líder del PSOE hablaba sobre “qué ocurriría si en España la mitad de los españoles defendieran que en el país hay presos políticos”. Con ese recuerdo inteligentemente usado por el alcalde madrileño se coloca en entredicho la postura del mismo Iglesias y del propio presidente del Gobierno, porque la apuesta ahora es el cese del vicepresidente segundo.
La conducta de Iglesias debería ser sufragada por Pedro Sánchez dice el alcalde
El alcalde de Madrid continúa arrinconando a Iglesias, y por eso considera que el presidente “Pedro Sánchez debería pagar el sueldo de Pablo Iglesias”. Y es que el dirigente popular coloca al líder de Unidas Podemos como una figura innecesaria en el poder político español. Casi al punto de que lo coloca como un radical que solamente ocasiona problemas y discusiones para que el presidente del Gobierno se oculte y cometa todos los errores que pueda.
Pero el alcalde de Madrid, asimismo ha cuestionado el supuesto concepto popular o "humilde" de Pablo Iglesias, porque para el popular se hace incomprensible que el vicepresidente "tenga cinco coches, cuando se dice un hombre representante de los vulnerables".
Y ese es un discurso que tiene varios años y ha afectado a la figura del jefe de Podemos, porque su discurso a favor de los obreros lo dejan en una realidad muy comprometida y eso el PP lo va a aprovechar como un aditivo para hacerlo tambalear en el Ejecutivo.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, condiciona a Unidas Podemos
José Luis Martínez-Almeida no solamente se plantea llevar una estrategia que culmine en el cese de Pablo Iglesias, sino que pretende asimismo avanzar en condicionar a Unidas Podemos en aislar al partido morado. La idea es que Podemos sea arrinconado para que nuevamente se repita el ciclo del PSOE como partido sin aliados. Un poco de bipartidismo pero con matices de diferencia.
El alcalde de Madrid y el PP pretenden que el Gobierno del PSOE y Podemos sea corto
Martínez-Almeida ha declarado que no cree que “Pedro Sánchez tenga una legislatura tan larga como piensa”. Y es que los populares abogan porque el PSOE y Podemos no gobiernen mucho tiempo, porque presienten que mientras pase el tiempo, los socialistas se asentarán para que sea complicado que el PP vuelva a gobernar. Y menos con la carga que tienen a su espalda del caso Kitchen, Villarejo, Rajoy, etc.
El mensaje del alcalde de Madrid a VOX
El alcalde de Madrid ha sentado la idea de que VOX debe unirse a ellos y no seguir divididos, y es que el popular sabe que todo va ser peor mientras Santiago Abascal se siga alejando, porque ese hecho va a significar tiempo concedido en el poder para el PSOE y su actual socio Unidas Podemos.
La derecha, mejor dicho el PP, ya se ha dado cuenta de que VOX es una realidad, y que ocultar la misma no es positivo. Porque los diputados de Abascal con abstenerse como recientemente lo hicieron en el Congreso colocan al PP otra vez en un incomprendido panorama.