Fue y sigue siendo considerada una de las bibliotecas más grande e importantes hasta la fecha; hoy día se considera una de las mayores catástrofes culturales su desaparición, de la cual poco se sabe y se cree que fue por un cúmulo de factores que desencadenaron su decadencia.

Fundación y explendor

Se dice que fue creada poco después de que Alejandro Magno fundara la ciudad en el 331 a. C. Una Biblioteca que fue fundada en el siglo III a. C. por Ptolomeo I Sóter, siendo ampliada por su hijo Ptolomeo II Filadelfo. A mediados de siglo, pasó a manos del poeta Calímaco de Cirene; se dice que durante su mandato había unos 490.000 libros, dos siglos depués, según dijo Aulo Gelio, aumentó hasta los 700.000 documentos, aunque se cree que es posible que se quiten ceros en ambas cifras, hay muchas dudas al respecto.

Llegó a ser un gran centro del saber, donde sabios, estudiantes y curiosos se acercaban a ella en busca del saber, incluso se dice que Hipatia, una de las poetisas más influyentes de su época estuvo al mando de ella durante sus últimos años.

Guerras y decadencia

Ya por la época en la que los soldados de Julio César quemaron la ciudad se dice que quedaban pocos documentos en ella, debido a los continuos saqueos, y según la unanimidad de historiadores, la culpa se la atribuía por igual a:

  • Romanos
  • Cristianos
  • Musulmanes

Ese acontecimiento sucedió en el siglo I a. C., se establece que la biblioteca desapareció alrededor de los siglos III a. C. y el IV a. C. Con la llegada, además, de las nuevas religiones supuso un abandono de la misma, ya no interesaban los libros.

De hecho, durante la invasión árabe, en relación a la biblioteca se dijo: "Si los libros están de acuerdo al Corán, no tenemos necesidad de ellos, y si se oponen al Corán, deben de ser destruídos". Han relacionado mucho la decadencia de todo tipo de documentos de saviduría con las religiones, con el fin de mantener atado y en secreto el saber, pudiendo someter a un único libro, el de su religión, su creencia.

Al final de todo lo relatado, la biblioteca de Alejandría acabó como otras tantas bibliotecas, antes o después de ella, extinguidas víctimas de la violencia, de la intolerancia del ser humano o, incluso, del informtunio.

Conclusión final

Poco más se sabe de ella, de hecho los historiadores e investigadores siguen tratando de encotrar referencias, averiguar cómo funcionaba o cómo sería su estructura completa.

En Alejandría se ha llegado a "resucitar" la biblioteca en otra zona, como conmemoración y para uso público, recondando un fantasma de lo que fue en la antigüedad.

Aunque nunca vaya a llegar a ser como lo fue, creen que llegarán a saber más de ella, de que llegará el momento en el que puedan explicar lo que verdaderamente fue la biblioteca y quiénes conformaron su equipo en totalidad.