El planeta lleva sufriendo los estragos de la huella que va dejando el ser humano desde casi el principio de nuestra existencia, hemos avanzado en tecnología pero no mucho en nuestra mentalidad y pensamiento, en ese aspecto parece ser que nos mantenemos primitivos. Los grandes empresarios y políticos parecen haber olvidado que por mucho dinero que hagan, si el mundo se rompe, nosotros lo haremos con él. Y Rusia lo está haciendo de nuevo.

¿Tendremos otro Chernóbil?

Rusia lleva una larga problemática en lo referente a accidentes nucleares, recientemente se le ha ocurrido la maravillosa idea de crear una central nuclear flotante, se la ha nombrado "Akademik Lomonosov", le han puesto el apodo de "el Chernóbil flotante" por los ecologistas.

Quieren llevar a cabo una gran empresa petrolera.

Teniendo en cuenta el historial de accidentes en cuanto a sus rompehielos y submarinos nucleares, no parece muy alagüeño, todo parece apuntar a un gran "pack" para una catástrofe nuclear a nivel mundial.

Hace 32 años fue Chernóbil, hace 7 años Fukushima, ¿Se repetirá la historia?

Explotación en el Ártico

Su plan, según a averiguado Greenpeace, que está al tanto y busca su rechazo; es enviarlo al Ártico para realizar una explotación a gran escala allá para la extracción de:

  • Petróleo
  • Gas
  • Carbón

Para su uso, en un frágil océano, cuya fauna y clima pueden verse drásticamente dañados al mínimo accidente que se haye. La limpieza de Chernóbil y Fukushima fue complicada y aún existen riesgos, además de zonas que jamás se recuperarán y otras que tardarán millones de años en estabilizarse los niveles de radiación.

Teniendo en cuenta que el clima Ártico es extremo, donde la noche polar nos ofrece temperaturas bajo cero y tormentas de nieve, parece aún más imposible acudir en ayuda. Por ello, Greenpeace han decidido acompañar pacíficamente protestando el viaje de dicho flotante, con pancartas mostrando su desacuerdo a todo lugar a su paso.

Un clima extremadamente frágil

Es una zona que se encuentra en uno de los polos, donde el campo magnético así como la atmósfera se ven casi inexistentes, por lo que es algo más vulnerable, calentándose el doble que en el resto del planeta. Ya se han perdido 3/4 partes en los últimos 30 años.

Aunque también se amenaza con una nueva era glaciar, donde va a ver un frío perpetuo, de momento no está confirmado, todo dependerá de los acontecimiento y del propio planeta.

Conclusión final

Parece ser que no aprendemos de nuestros errores pasados, no recondamos lo que apenas poco más de 30 años pasaron, lo que ya está ocurriendo y lo que podría volver a ocurrir.

Gracias a personas conscientes de estos hechos, de que nada más que tenemos un planeta y de que esta catástrofe nuclear posible, lo mejor que nos podría traer, si tenemos suerte, es un invierno nuclear. Todavía podemos estar a tiempo de cambiar las tornas, de ponernos en bandera del planeta y que Rusia retire su idea de inmediato, de que las petroleras aprendan y de que cambiemos los métodos de energía destructivos que se están teniendo llevándonos al fin del mundo tal y como lo conocemos. Nosotros somos los que tenemos el poder.