El aún presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se declara ahora "indignado" y condena el ataque al Capitolio, que él mismo instigó, en un vídeo subido este jueves a su cuenta de Twitter para rechazar el violento asalto al edificio por parte de sus seguidores, que ya se ha saldado con cinco víctimas mortales.
Además de la condena, Trump se expresó en los siguientes términos: "El Congreso ha certificado los resultados electorales, una nueva Administración tomará posesión el 20 de enero.
A partir de ahora me centraré en asegurar una transición de poder fácil, ordenada y sin interrupciones. Es el momento de la reconciliación y de sanar heridas".
Han tenido que pasar más de dos meses desde las elecciones ganadas por el demócrata Joe Biden para que el magnate reconozca su derrota, impelido quizá por la amenaza de que se inicie un proceso contra él acusándole de ser el instigador del asalto al Capitolio.
El aún presidente de los EEUU ha necesitado treinta horas para manifestar su repulsa
La declaración fue realizada justo después de que le fuera levantado el bloqueo de doce horas impuesto por Twitter a raíz de los mensajes enviados a través de dicha red social antes y durante los fatídicos hechos.
En los tuits previos a la insurrección, se dirigió a sus seguidores con frases como "Tenéis que ir al Capitolio" o "Nunca podréis recuperar nuestro país si sois débiles", insistiendo una y otra vez sobre la falsedad del resultado de las votaciones.
A pesar de todo, no parece que Trump haya logrado que varíen un ápice las intenciones de la oposición demócrata, para quien el presidente debe ser destituido antes de que finalice su mandato, dentro de once días. Cabe matizar que la red social Twitter, ayer viernes y a pesar del giro dado por Trump, decidió bloquear indefinidamente su cuenta.
Se barajan dos fórmulas para destituir a Donald Trump
La 25ª Enmienda. Esta se implementó a raíz del atentado contra John F. Kennedy con la finalidad de disponer de un mecanismo de destitución del presidente en el caso de quedar incapacitado para realizar sus funciones.
Es difícil que prospere, pues se necesita un grado de consenso entre senadores republicanos y demócratas difícil de alcanzar y el vicepresidente, Mike Pence, debería asumir la incapacidad de Trump para realizar su labor en la presidencia.
El 'impeachment'. Si se produjera un 'impeachment', Donald Trump se convertiría en el primer presidente sometido dos veces a esta especie de moción de confianza -la primera fue por el caso 'Ucraniagate'-. A pesar de todo, Trump sigue gozando de enorme popularidad entre las bases republicanas, si bien las dimisiones dentro de su partido no se han hecho esperar.
Las más destacada ha sido la de la secretaria de Transporte, Elaine Chao, a la sazón esposa del líder republicano del Senado, Mitch McConnell, quien fuera el mayor aliado de Trump hasta la fecha.
Lindsey Graham, senador republicano por Carolina del Sur y uno de los más fervientes defensores de Donald Trump, se ha expresado en los siguientes términos: "Trump y yo hemos tenido un viaje genial juntos, pero ya es suficiente".