El profesor de Historia asesinado, en una clase sobre la libertad de expresión, mostró unas caricaturas de Mahoma como tema a debatir. Invitó a sus alumnos musulmanes a abandonar la clase por sus creencias, pero aun así el colegio recibió criticas por este hecho, llegando a ser zarandeado por algunos padres. La trágica historia terminó con su asesinato por parte de un joven musulmán radical, el cual le degolló cerca del colegio donde trabajaba.

El autor del crimen subió la atrocidad a la red social Twitter

Según algunos periódicos franceses, el autor celebró su delito en Twitter al grito de “en nombre de Alá”, para después dirigirse al presidente francés, Emmanuel Macron, por la red social diciéndole que había ejecutado a un perro, unos de sus infieles y le deseaba que fuera al infierno, acompañado el texto de una foto del homicida sosteniendo la cabeza del profesor.

Estos tweets fueron removidos rápidamente de la red social.

Finalmente, el asesino fue abatido por la policía con diez tiros

El asesino fue visto en un pueblo adyacente al lugar de los hechos, por lo que la policía se presentó allí y ordenó al joven tirar al suelo el cuchillo que blandía. Este se negó, amenazando a los agentes con el mismo con gestos agresivos, hasta que al final fue abatido por la patrulla policial que se presentó con diez tiros, después de que el criminal gritase “Alá es grande”. A última hora de la tarde de la noche, fuentes oficiales informaron de que el joven pertenecía a una banda con varios miembros fichados como islamistas radicales peligrosos, aunque el asesino no estaría dentro de ninguno de los ficheros.

Se han detenido a nueve personas del entorno del asesino

La policía ha detenido a nueve personas más, entre ellas un menor de edad, las cuales tenían trato y vínculos con el criminal, como el padre que subió a las redes sociales el vídeo indignado de que el profesor hubiese mostrado unas caricaturas de Mahoma, las cuales, eran las que propiciaron el atentado contra la revista Charlie Hebdo.

La decapitación ha causado estupor y una conmoción nacional, haciendo que el mismo presidente, Macron, se presentase en el lugar de los hechos junto a los ministros de Interior y Justicia, en un acto para rendir homenaje a la víctima y dar fuerzas y acompañar en el sentimiento a los compañeros del maestro.

Macron declaró después que un compatriota había sido asesinado por enseñar lo que era la libertad de expresión, la defensa por creer o no creer, terminando su discurso con la frase “no pasarán”, en relación con el extremismo islámico.

Hizo un llamamiento a toda la sociedad francesa para estar unidos en los mismos valores, historia y leyes.

Sin embargo, este no es un caso aislado. El asesinato ha ocurrido semanas después de que un hombre de origen pakistaní, el 25 de septiembre, armado con un gran cuchillo, atacase a un hombre y una mujer, que fumaban tranquilamente a las puertas de la productora de Televisión donde trabajaban, dejándoles gravemente heridos. El edificio era el mismo donde se encontraba antes las oficinas de Charlie Hebdo, por lo que tomo a los empleados por trabajadores de la revista.