Un diputado argentino renunció a su escaño, luego de ser suspendido por besar los senos de su mujer durante una sesión parlamentaria en línea. Juan Emilio Ameri sorprendió a sus compañeros legisladores al dejar que se sentara una mujer en sus rodillas y luego se inclinó y besó su pezón derecho, después de bajarle la blusa negra. El diputado pertenece a la coalición gobernante, Frente de Todos que llevó a la presidencia de la Argentina al Dr. Alberto Fernández por la provincia de Salta, es casado y padre de tres niñas.

La reunión parlamentaria se interrumpió por una demostración sexual de un diputado

Las imágenes del bizarro momento ocurrieron en una sesión parlamentaria online, mientras el diputado Carlos Heller, de la misma coalición, hacía una defensa del proyecto de ley presentado por el oficialismo sobre la creación de un Fondo de Garantía de Sustentabilidad del Sistema Integrado Previsional (FGS) para la renegociación de la deuda que las provincias tienen con la entidad de la Seguridad Social argentina (ANSeS).

El presidente de la Cámara de Diputados, Dr. Sergio Massa, detuvo inmediatamente la sesión y reclamó la suspensión ipso facto del diputado salteño, según el artículo 182 y la creación de una comisión que gestione las sanciones ejemplificadoras.

La escena sexual se mostró En Directo y en pantalla grande, ante los atónitos ojos de toda la Cámara de Diputados y Massa debió cambiar el foco de la labor parlamentaria: de la renegociación de las deudas a la sanción de un diputado cometiendo actos impropios.

Raudamente se interrumpió la sesión para sancionar al diputado argentino

El diputado ensayó un estrafalario justificativo, diciendo que su pareja se había realizado una operación de aumento mamario y que le molestaban las cicatrices. “Le dí un beso en la teta, eso es todo”, explicó el hombre, al tiempo que decía que la conexión a internet era muy mala, que estaba caída y que no sabía que se había reconectado.

Claro que no alcanzaron esas explicaciones para detener la ola de sanciones institucionales y el escarnio público. El diputado fue suspendido por la Cámara de Diputados y fue arrasado por una ola de memes en las redes sociales. La misma noche del jueves, presentó la renuncia a su cargo electivo.

El Parlamento argentino, equivalente a las Cortes Generales de España, hace sesiones de forma virtual por la pandemia de coronavirus para gran cantidad de diputados y senadores que se encuentran en las provincias e imposibilitados de trasladarse a la Ciudad de Buenos Aires, donde reside el Congreso de la Nación. El disparatado hecho se desarrolló en la Cámara de Diputados del Poder Legislativo del país de Latinoamérica.

Las reuniones telemáticas, plagadas de lamentables errores en vivo

El presidente de la Cámara, Dr. Sergio Massa, era uno de los pocos que se encontraba de forma presencial, cuando ocurrió el incidente y reaccionó con fuerte indignación sobre el patético acontecimiento. Ya en otras oportunidades habían ocurrido aberrantes situaciones cuando un diputado de la oposición, Esteban Bullrich del PRO, reemplazó su imagen por un cartel de su cara fijo, otro apareció tomando whisky o en la cama, tapándose la cara. “En el recinto se sancionan normas de conducta que le exigimos a la sociedad que cumpla; entonces, los primeros que las tenemos que cumplir somos nosotros, los que creamos y sancionamos esas normas” ejemplificó Massa.

España también tuvo sus deslices. El pasado mes de junio, la vicealcaldesa y concejal Paula Moreno del Ayuntamiento de Torrox, Málaga, fue criticada por participar en una reunión del consejo por Zoom desde una tumbona en la playa. El concejal Bernardo Bustillo de Torrelavega, Cantabria, se duchó y apareció totalmente desnudo, sin advertir que la cámara estaba encendida. Tuvo que presentar su renuncia. Pero nada se compara con el grave episodio protagonizado por el diputado salteño, Juan Emilio Ameri.