En los últimos 45 días se registraron más de una docena de ataques hacia extranjeros en Italia, los últimos de los cuales han sido dirigidos a personas provenientes de África; Daisy Osakue, de origen nigeriano, resultó herido de un ojo este lunes después que desconocidos le arrojaran huevos desde un coche en marcha.
Los partidos se manifiestan al respecto
El Partido Demócrata (PD, centroizquierda) pidió este lunes la presencia en el Parlamento del ministro del Interior, Matteo Salvini, líder del partido de la Liga de extrema derecha nacionalista, para explicar las medidas que pretende tomar "para erradicar estos fenómenos que parecen aumentar, alimentados por la propaganda racista".
"Existe un aumento que nos ha tenido preocupados en cuanto a las estadísticas de ataques racista en el territorio italiano al cual debemos dar reconocimiento y sacar a la luz pública", afirmó el secretario general del PD, Maurizio Martina, que anunció para septiembre una gran manifestación nacional en respuesta al "clima de odio".
Salvini respondió calificando la "alarma racista" de "invención de la izquierda": "Los ciudadanos de este país son en general personas buenas, pero ya se ha colmado la paciencia de la mayoría de ellos. Por mi parte en carácter de ministro trabajo incansablemente para traer paz a nuestra ciudadanía".
La ministra de Asuntos Públicos, Giulia Buongiorno, también de la Liga, afirmó por su parte que "la única alerta es la catarsis generada por la toma de decisiones incorrectas alrededor de las políticas migratorias vigentes", según una entrevista con La Repubblica publicada hoy.
También el líder del Movimiento 5 Estrellas, que integra la coalición de gobierno con la Liga, y ministro de Trabajo, Luigi di Mayo, rechazó el que haya una "alarma racista" y afirmó que se trata de "un argumento de la izquierda" para atacar a Salvini.
Las cifras son alarmantes
Un informe de la comisión parlamentaria italiana sobre Intolerancia, Xenofobia y Racismo, divulgado el 6 de julio, concluyó que la mayoría de los italianos piensa que la tasa de inmigrantes en el país es del 30%, cuando en realidad es del 8%.
El mismo estudio concluyó que más de la mitad de los italianos considera que "un barrio se degrada cuando hay muchos inmigrantes" (56,4%) y que "el aumento de inmigrantes favorece la difusión de la criminalidad y el terrorismo" (52,6%).
Se lee en el documento, que "demuestra la existencia de una pirámide de odio basada en estereotipos, representaciones falsas, insultos y lenguaje hostil" que lleva a "un nivel superior de discriminación y de discurso y crímenes de odio".