Los estudios realizados por una docente de la EAP de Nutrición de la UNMSM, Patricia Vega, destacan el desnivel nutricional en estudiantes universitarios. Comenta que la vida de un universitario es sedentaria, dejando dicho que no hay un orden con el horario de las comidas en el día y eso tampoco es saludable.

Desequilibrio nutricional

La vida del universitario es, por ende, una vida de rutinas y estrés, lo que lleva a la persona a tener un desequilibrio nutricional que puede afectar a su nivel de entendimiento, es una etapa para crecer mentalmente pero sin olvidar de que deben cuidarse física y mentalmente y en esto influye mucho lo que es una buena alimentación y la actividad física de la persona.

La especialista explicaba que el estudiante universitario no tiene una alimentación continua porque dedica su tiempo a jornadas de estudio más que en tiempo para él, así que el estudiante tiene un déficit en su alimentación y en el cuerpo por no realizar actividad física.

Según palabras de la experta, los estudiantes no tienen horario establecidos para desayunar, almorzar y cenar, lo que provoca un mal funcionamiento a su organismo en la digestión y esto hace que tengan problemas de concentración, obesidad, desnutrición, Enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer".

Recalcó que el estudiante universitario debe tener una distribución en su alimentación de acuerdo con el valor calórico de la dieta -20% desayuno, 50% almuerzo y 30% cena- y no se debe obviar el desayuno, ya que es el más importante que nos brinda la energía necesaria para cubrir la jornada de la mañana.

Una alimentación sana

Una dieta equilibrada es lo más recomendable para cualquier persona y en el caso del estudiante universitario aún más porque debe incluir todos los nutrientes necesarios para que este tenga un día eficiente en los estudios. Algunas recomendaciones que realizan los especialistas para poder cumplir con la dieta balanceada son los siguientes: Dormir lo suficiente, 8 horas como es debido; realizar un desayuno abundante y equilibrado compuesto por lácteos, frutas y cereales preferiblemente; evitar zumos envasados o néctares por la alta concentración de azúcar que tienen; tener 40 minutos de ejercicios diarios y dividir los tiempos para cada acción a realizar; tomar un almuerzo saludable compuesto principalmente por verduras, granos o cereales, legumbres y proteínas y evitar el exceso de grasas; y leer o hablar con los amigos ayuda a despejar la mente del estudiante.

Mantener una vida saludable

Para todo estudiante es un poco ajetreado y estresante el día a día de estudio, pero este no debe descuidarse de su alimentación y cuerpo, por esto se recomienda hacer una división de tiempo y/o poder cargar con alimentos nutritivos en ese espacio de tiempo.

Con esto, Patricia Vega dice que el estudiante puede alcanzar un óptimo estado de saludable y fortalecer su máximo rendimiento físico e intelectual en el estudio. El universitario debe comprender que el estudio es un poco agotador cuando se hace en exceso y sin cuidado y, por ende, debe cuidarse llevando a cabo estas u otras recomendaciones para su mayor beneficio.