Hay una preciosa tradición referente al Belén colocado en casa: la de dejarlo hasta la fiesta de la presentación de Jesús en el Templo. Entre la fiesta del bautismo del Señor, que marca el final del Tiempo de Navidad, y la fiesta de la presentación, también denominada de las Candelas y Candelaria, transcurren 40 días. Una cifra significativa y simbólica: los 40 días de Cuaresma, los 40 días de Jesús en el desierto...
El fin de un Tiempo
Como expliqué en una entrega anterior, el calendario litúrgico de la Iglesia se divide en bloques de tiempo con un sentido celebrativo particular. Así, desde que ese calendario ha comenzado a girar, hemos pasado ya por:
- Tiempo de Adviento: repaso a las profecías y esperanzas del Antiguo Testamento, anuncio de la cercanía del Mesías prometido por Dios, preparación a la Navidad.
- Tiempo de Navidad: nacimiento del niño Dios, manifestación a los pastores y a los sabios Magos, huida, bautismo de Jesús adulto.
La fiesta de hoy, bautismo del Señor, es la que marca el fin del Tiempo de Navidad.
Lo que viene ahora se conoce como Tiempo Ordinario, de modo popular. Si se acaba la Navidad, lo normal es quitar los adornos y las representaciones navideñas, ¿verdad?
Una tradición entrañable que alarga la Navidad
Podemos deshacernos de la decoración de Navidad de casa, pero el belén podría quedar tranquilamente expuesto. Una tradición, todavía en vigor, dice que el belén se mantiene incólume esperando la fiesta de las Candelas. Litúrgicamente, es la fiesta de la presentación de Jesús en el Templo. Ese Jesús es el niño Jesús, así que parece normal mantener en Misterio, o Nacimiento, en casa hasta entonces.
No hay que olvidar que la Iglesia no sigue un orden cronológico en sus celebraciones a lo largo del año.
Si no, un par de ejemplos rápidos: termina la Navidad pasando de Jesús niño a Jesús adulto en uno o pocos días, luego muestra a Jesús predicando y regresa (el 2 de febrero) a Jesús recién nacido; luego, del Jesús itinerante al juzgado, muerto y resucitado, para volver al predicador terreno tras ver cómo ascendía al Cielo.
Iniciativas públicas y privadas para visitar belenes en casa
Cuantos dejen sus belenes hasta el 2 de febrero podrían ponerse en contacto con la asociación belenista más cercana. En varias ocasiones, se ha dado el caso de interesados que visitan belenes caseros fuera de Navidad. Los días mágicos los pasan en familia y los laborales aprovechan para visitar esos belenes.
También puedes informarte de concursos de belenes, que suelen darse durante la Navidad.
Por ejemplo, hay un concurso que promueve la diócesis de Ourense, donde envías por Whatsapp foto de tu belén casero. La tradición y las iniciativas van de la mano, enriqueciendo la historia belenista.