¿Sabias que hay cosas que no te van a contar los republicanos,por desconocer lo que se hizo en la República Española?

Unos dirán que la segunda República española fue una forma de estado democrática, y te lo dirán a día de hoy. Pero dicho sistema instaurado fraudulentamente esconde, lo cual voy a explicar, ciertas cosas poco democráticas, y con esto quiero decir que las libertades en ciertos aspectos de la vida eran inexistentes, y los que se contemplaban podían llevarte a prisión.

¿ La República Española fue un sistema de gobierno instaurado fraudulentamente?

Te dirán que la Segunda República fue una victoria de las fuerzas republicanas, y es que en las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 obtuvieron 5775 concejalías, frente a las 22150 conseguidas por los monárquicos, casi cuadriplicando a las obtenidas por los republicanos. El voto republicano tuvo su ego en las grandes ciudades obteniendo de esta manera las capitales de provincia, sembrando así la euforia entre las fuerzas republicanas. Lo que provocó que dos días después el rey Alfonso XIII partiera hacia el exilio, no por el resultado electoral, sino más bien para evitar un baño de sangre entre republicanos y monárquicos, alegando el rey en el ABC el 17 de abril: “ quiero apartarme de cuanto sea lanzar a un compatriota contra otro en una fratricida guerra civil”.

¿Por qué se aprobó una constitución sin referéndum y sin voto femenino en la República Española?

Actualmente se presume del voto femenino por parte de los partidos de izquierdas. El 28 de junio de 1931 se voto esa constitución, y sólo pudieron votar los hombres ya que el voto femenino no fue aprobado hasta el 1 de octubre, auspiciando un parlamento con muy escasa presencia de las fuerzas derechistas.

Tampoco se convocó ningún referéndum para dar aprobación a la constitución, negando de esta manera que el pueblo pudiera ejercer su derecho a decidir sobre esa carta magna.

Cuando llegó el momento de debatir el tema del voto femenino hubo dos mujeres parlamentarias, una de ellas era Clara Campoamor ,del partido radical, y la otra Victoria Kent, del partido republicano radical socialista.

La primera de ellas voto a favor de incluir el voto femenino, la segunda en contra, esta última basó su alegato en las siguientes palabras: Si las mujeres españolas fueran todas obreras, si las mujeres españolas hubiesen atravesado ya un periodo universitario y estuvieran liberadas en su conciencia, yo me levantaría hoy frente a toda la Cámara para pedir el voto femenino.”.

Por esta regla de tres se podría haber argumentado en contra del voto masculino, pero fue la diputada por Badajoz la que puso la guinda al pastel, Margarita Nelken, del PSOE, si de ese partido de hoy que llena la boca a la hora de promulgar derechos y apropiarse de victorias que no son suyas.

Esta señora manifestó su rechazo al voto femenino alegando lo siguiente: “Poner un voto en manos de la mujer es hoy, en España, realizar uno de los mayores anhelos del elemento reaccionario”.

Y de esta manera se fumo un puro de los de mil duros. Lo redundante es que las mujeres votan por primera vez el 19 de noviembre de 1933, otorgando por mayoría la victoria a la derecha, lo que evidencio el rechazo de la izquierda al voto femenino.

La gente, la de hoy, habla de "La república Española" como un paraíso de libertades y un sin fin de derechos. Pero en la realidad no fue así. Había censura en el cine, en el teatro, en la prensa y sobre todo a la hora de mencionar a las fuerzas monárquicas en forma de halago, ya sea hablando de ellas, o mostrando alguno de sus símbolos, así como al menosprecio a las instituciones republicanas, bien por expresión o por acción. Esto quedó legislado en la Ley de Defensa de la República, quedando estos hechos tipificados como delito. Con ello quedaba prohibido cualquier crítica al gobierno o al régimen por parte de los ciudadanos, organizaciones, etc... Esta ley supuso la instauración de una censura, notoria en los medios de prensa de la época ya que dejaba en los periódicos espacios en blanco, en ellos se podían leer “Visado por la censura”.

En lo referente al cine y al teatro la censura, en el primero de ellos fue enfocada a toda aquella imagen o escena con entonaciones lujuriosas, ya bien podían ser entre personas, animales, vegetales o insectos. Este tipo de escenas que podían evocarte al “deseo sexual”, quedaban previamente censuradas en el teatro, incluido las obras infantiles, el empresario o representante de la obra tenía que elevar un instancia con antelación al estreno de la obra. Algunas obras de la época quedaron anuladas, o modificadas, censurando la critica al gobierno o la opinión política.

Vagos y maleantes, otra idea de la segunda República Española

Otra de las relaciones sobre la censura fue la polémica ley de vagos y maleantes, como es de esperar a día de hoy muchos de la izquierda piensan que es una ley puramente franquista, y no, es republicana. Los vagos, los ebrios, los que ocultaban su nombre o identidad, o el que no justificase el dinero que poseía o demás posesiones, eran sujetos de catalogados “en estado peligroso”.

Esta ley fue un proyecto de Manuel Azaña y fue promulgada el 4 de agosto de 1933.

El castigo impuesto podía ser una multa hasta el internamiento, así como la intervención del dinero y de los bienes.

Una de las principales cosas que censuró la segunda República Española fue sin lugar a dudas la libertad religiosa. En su constitución, y digo “su constitución” porque al parecer no era la de todos, ni para todos, en el articulo 26 de la misma se establecía la disolución de las ordenes religiosas que estableciesen el voto a una autoridad distinta que no fuese la del estado. Exactamente todas aquellas que reconocían como autoridad al Papa. La persecución religiosa daba de esta manera comienzo, y en sus primeros pasos se disolvió la compañía de Jesús y se nacionalizo sus bienes. De esta manera también se disolvía todas las ordenes religiosas que “constituyan un peligro para la seguridad del estado”.

También se prohibió la dedicación de estas ordenes a la enseñanza religiosa, labor que por parte de estas ordenes acumulaba un gran esfuerzo, pudiendo alfabetizar a personas de clase humilde que carecían de recursos económicos. Este artículo suponía un jaque mate a la libertad de educación. Según la república la enseñanza debía ser laica y deberse a ideales de solidaridad humana, excluyendo la religión del sistema educativo. Si esto se aplicase en el día de hoy violaría el articulo 18 de la declaración internacional de los derechos humanos. Los religiosos que podrían dar enseñanza debían de someterse al control del estado.

Como he dicho en las primeras elecciones en donde pudo votar la mujer, vencieron las derechas, se denominaban por aquella época CEDA (La confederación Española de Derechas Autónomas), pero aún siendo vencedores legítimos, estos no gobernaron, y no lo hicieron por que no les dejaron.

Las elecciones fueron el 19 de noviembre de 1933, y la CEDA era presidida por aquel entonces por Gil Robles. Los resultados electorales de los que se tiene escaso conocimiento, y que son los únicos en la historia que faltan del archivo nacional, fueron 152 diputados para la CEDA, 102 para el Partido Radical, y el PSOE con 59. La izquierda de aquel entonces manifiesto que si gobernaba la derecha se movilizarían para una insurrección civil, pero los radicales con los anarquistas a la cabeza comienzan un golpe de estado disfrazado de huelga general, todo esto sin previo aviso. Las cifras, 89 muertos y 163 heridos. Quemas de iglesias, explosiones, bombas contra las principales vías de comunicación , desordenes públicos graves entre otras cosas hicieron de antesala a lo que se acontecía.

Alcalá Zamora encomienda la formación de un gobierno a Alejandro Lerroux, del partido radical, ignorando de esta manera los resultados electorales. La CEDA cede ante los golpistas, pero al poco le exigen al gobierno entrar en el mismo, este accede, y ocurre la sorpresa, el PSOE encabezado por la UGT inicia otro golpe de estado, también camuflado como huelga general. Estos intentan asaltar el Ministerio de Gobernación de la Presidencia del Gobierno, unas semanas de violencia que obliga a la intervención militar por parte del ejercito para subsanar el problema, esto se tradujo en más de mil muertos, entre ellos 35 sacerdotes asesinados por los golpistas. Este fue uno de los episodios mas graves de la segunda república antes del levantamiento militar.

En el 1931, Largo Caballero (PSOE) , manifestaba perlas verbales de tal calado cuando veía peligrar su asiento que venían a decir esto: “No puedo aceptar la posibilidad, que sería un reto al partido, y que nos obligaría a ir a una guerra civil. Poco después continuó con sus amenazas, manifestando nuevamente: Si no nos permiten conquistar el poder con arreglo a la Constitución… tendremos que conquistarlo de otra manera”. No contento con lo expuesto, volvió con una nueva arremetida, volviendo a decir: “Tenemos que luchar, como sea, hasta que en las torres y en los edificios oficiales ondee no la bandera tricolor de una República burguesa, sino la bandera roja de la Revolución Socialista“. Al final acabo por reconocer lo inevitable : “Nuestro partido, es ideológicamente, tácticamente, un partido revolucionario… cree que debe desaparecer este régimen

Tras ya conseguir ser detenido, y posteriormente, en libertad por la convocatoria de elecciones, este no cesa en su intento de golpe de estado.

En un mitin vuelve a arremeter manifestado otra vez: si triunfan las derechas nuestra labor habrá de ser doble, colaborar con nuestros aliados dentro de la legalidad, pero tendremos que ir a la guerra civil declarada”, y al día siguiente manifiesta su “democracia” nuevamente diciendo: “la democracia es incompatible con el socialismo, y como el que tiene el poder no ha de entregarlo voluntariamente,por eso hay que ir a la Revolución“, añadiendo Tenemos que recorrer un periodo de transición hasta el socialismo integral, y ese período es la dictadura del proletariado, hacia la cual vamos.”

Así que antes que Francisco Franco apoyara el alzamiento contra La República Española, había otro al que le han lavado la cara, que proviene de un partido con representación parlamentaria a día de hoy. Que quede claro cual es la verdadera historia de España. Que estamos hartos de tanta manipulación histórica, por nuestro pasado, presente y para evitar futuros impropios.