Humberto Campins es un destacado científico oriundo de Barquisimeto, capital del estado de Lara, en Venezuela, donde transcurrió su niñez y adolescencia mientras fantaseaba con "viajar al espacio en un helicóptero" antes de dar sus pasos iniciales en la astronomía.

Ya lleva más de tres décadas en la NASA y hoy irrumpe nuevamente en la palestra científica después de que esa institución haya anunciado las zonas donde la nave espacial OSIRIS-REx recolectará vestigios de la superficie del asteroide Bennu. Desde principios del año 2019, Campins fue designado como miembro principal de la comisión de la nave que orbita alrededor de ese cuerpo celeste.

El asteroide Bennu y su estudio

Se trata de una inmensa roca que mide aproximadamente 490 metros de diámetro y está posicionada a 300.000 kilómetros de la Tierra. Se pretende tomar una muestra de su superficie y traerla a nuestro planeta.

Bennu se considera de gran peligrosidad para la Tierra por su proximidad y las dimensiones que presenta. Por ello, los científicos quieren saber con mayor exactitud su trayectoria, ya que se calcula que podría pasar cerca de nuestro planeta en el año 2135. Por su antigüedad, puede revelar numerosos secretos en cuanto a los principios del sistema solar.

Humberto Campins, en una entrevista que concedió al programa de televisión estadounidense 'News 6 at Nine', expuso detalladamente el procedimiento de mapeo del asteroide.

Sitios para recoger la muestra

Desveló que Nightingale y Osprey son los nombres con los que se ha bautizado a los lugares donde se recogerán las muestras, en recuerdo a dos pájaros de la mitología egipcia. Nightingale es la zona principal. Si se presentara algún contratiempo, tienen ubicado como segunda opción a Osprey.

Detalló que Nightingale es la alternativa más al norte de Bennu.

La zona está ubicada en un pequeño cráter, cercado por otro más grande de 140 metros de diámetro. El lugar está compuesto especialmente de material negruzco de grano delgado y posee la reflexión más baja y la mejor temperatura en superficie de los cuatro lugares seleccionados en principio.

Inicialmente, la nave espacial se aproximaría a una zona de 45,7 metros de ancho para recoger la muestra.

No obstante, después de analizar millares de imágenes de Bennu, la comisión determinó que no existía una superficie aplanada que facilitara ese tipo de atraque en el asteroide, el cual tiene características rocosas.

Modificación del plan

Dados los nuevos datos sobre Bennu, el grupo modificó su plan de recogida. A partir de ahora, la nave espacial efectuará la recolección de forma autónoma, aproximándose a la superficie del asteroide, ejecutando su trabajo y alejándose.

Esta misión solamente durará unos cinco minutos. Sin embargo, los miembros de la misión espacial tendrán la información con cinco minutos de demora, que es el tiempo estipulado para que llegue la noticia a la Tierra. Esto quiere decir que se experimentará un silencio de cinco minutos decisivos mientras la nave OSIRIS-Rex ejecuta su tarea.

Los científicos a cargo de la misión tienen planificado esperar las novedades en la Universidad de Arizona para septiembre del año 2023, cuando se espera su llegada, y comenzar así el estudio de la muestra obtenida.