8 Directoras Creativas de diferentes ciudades de España, comienzan a intercambiarse mails y abren una página en Facebook hace apenas un año.
Así comienza la historia de #masmujerescreativas. Una plataforma que cada día coge más fuerza a través de la organización de eventos, charlas y actividades que se promueven a través de ella.
El otro día asistí en las oficinas de Facebook en Madrid a una charla que ofreció Carolyn Everson, vicepresidenta de Global Marketing Solutions Facebook a las mujeres creativas de este movimiento. Ella hizo que las cosas cambiaran en Facebook a partir de su llegada en marzo de 2011, hasta entonces se hacía poco caso a las llamadas de las agencias de publicidad, ahora ganan mil millones de dólares cada trimestre en ingresos publicitarios.
Curioso, ¿no?
Quizá han sido las mujeres publicitarias las que han prendido la mecha, pero a ellas ya han comenzado a unirse diseñadoras gráficas, fotógrafas, actrices… Esto promete convertirse en todo un incendio. Y es que los sueldos no igualitarios, los problemas derivados de la conciliación familiar y que tan solo el 3% de los directores creativos de este país sean mujeres, hace que las oportunidades laborales no sean exactamente las mismas.
Entonces, ¿qué les vamos a decir a ese 59% de mujeres estudiantes de publicidad? ¿Que se han equivocado de carrera? O ¿Que su vocación no va a estar igual de bien pagada que la de sus compañeros varones? ¿De verdad que estamos en el siglo XXI? A mí me suena más a los años 60.
A mí todo esto me recuerda a una chica llamada Peggy Olson, un personaje de ficción de la serie Mad Men, que tenía que renunciar a su vida personal, para abrirse un hueco a hachazos en el mundo de los hombres directivos.
No, no queremos ser Peggy Olson. Ni escribir cartas agradeciendo las oportunidades y la igualdad como un hecho singular “cartadeunacreativa.com” 17 cartas, 17 historias personales, 17 excepciones.
Actualmente hay más de 80 creativas trabajando como voluntarias, en proyectos organizados por #masmujerescreativas para que no existan más excepciones, si no una situación justa para todas.
