Cuando la esperanza nos mueve, nada es imposible para el ser humano. Tarde o temprano el esfuerzo tendrá resultados favorables. Así ocurrió con Wang Mingqing, un hombre de 49 años de edad que nunca dejó de creer en la posibilidad de encontrar a su hija perdida. Cuando el sueño de reencontrarla parecía morir, con las técnicas aplicadas, Wang y su esposa decidían cambiar la estrategia. Nunca se dieron por vencidos, hasta que en el 2015 surgió una nueva idea.

Quizás para muchos sentarse a llorar y esperar que todo suceda es la reacción más común pero los esposos Mingqing tenían la meta de encontrar a su hija y no iban a detenerse hasta encontrarla.

Así lo informó el Diario del Pueblo, destacando también que la niña desapareció en el año 1994 cuando apenas tenía la edad de 3 años. Este evento ocurrió luego de que el padre tuviese un pequeño descuido, mientras trabajaba en un puesto callejero de fruta, junto a la pequeña.

Estrategias de búsqueda

La estrategia más efectiva surgió en el año 2015, cuando Wang decidió trabajar como taxista y contar su historia a todos los pasajeros. Su propósito fue tan determinado que posteriormente logró que la prensa también colaborara con la búsqueda de la hija perdida el 8 de enero del año 1994. Finalmente, este año encontró a su hija, luego de 24 años de búsqueda en la ciudad central China de Chengdu y quien ahora tiene 27 años de edad.

Sin embargo, esta no fue la única estrategia a realizar. Lo primero que hicieron los señores Mingqing y su otra hija, fue pasar años forrando la ciudad con carteles, colocando la cara de su hija perdida. Además, también solicitaron la colaboración de la policía, quienes realizaron las investigaciones pertinentes. Pero los padres de la niña, continuaron la búsqueda visitando también los orfanatos y los distintos hospitales.

No obstante, el taxi fue el único plan que logró que el mensaje fuese difundido con mayor rapidez. La historia fue contada a más de 17.000 de los pasajeros. Y nunca se sabe quién está sentado entre los asientos de un taxi. Uno de los pasajeros era un buen contacto de los medios de comunicación y consiguió que la historia fuera redactada en prensa, para darse a conocer en toda China.

Un encuentro sorpresivo

Una vez publicado en prensa, el mes pasado, Kang Ying vio el retrato realizado por la policía de cómo sería la hija de Wang de adulta. Esta imagen, incluía una cicatriz en la frente que tenía desde muy pequeña. Así que sin saber que se trataba de ella, Kang pudo leer la historia que contó su propio padre para encontrarla.

Es entonces cuando decidió contactar a la policía y luego a sus verdaderos padres, específicamente el pasado 16 de marzo. Además, para corroborar la paternidad, el 1 de abril ella también se realizó la prueba de ADN, que luego dio como resultado la confirmación de que realmente se trataba de la niña que hace casi un cuarto de siglo se había perdido.

Se trata de una experiencia que ha servido como ejemplo a todo el mundo.

El mensaje más importante de todo esto, es que siempre debemos ser perseverantes hasta que los sueños sean cumplidos. Wang, pudo conversar con su hija gracias a la tecnología. La prensa china publicó algunas imágenes en las que el padre y la hija hablan a través de una computadora. Las fotos reflejan mucha alegría entre ellos y se espera que se reúnan todos en el transcurso de la semana.