Según una investigación publicada el año pasado en la revista británica ‘Nutrition and Diabetes’, la pasta no contribuye al aumento de peso o al incremento de la grasa corporal. A continuación, seis formas adecuadas que se deben seguir para disfrutar de la pasta sin engordar.
Pasta 'al dente'
Cocinar la pasta al 'dente' es decir, que esté cocida, pero que aporte firmeza al masticarla. Esto permitirá que la persona pase más tiempo en digerir el alimento, lo cual ocasionará un consumo mayor de energía y un menor índice glucémico; esto significa que la persona no volverá a tener hambre por unas cuantas horas.
Raciones adecuadas
Las raciones de pasta, así como de cualquier otro tipo de alimento, es importante que sean equilibradas. Lo recomendable es consumir entre 80 y 100 gramos por persona, a los cuales se le van a sumar los otros ingredientes, ya sean salsas o vegetales. Esto representa más o menos media taza para las mujeres y 2 tazas como máximo para los hombres.