La ‘Fundación LGTB’ en Manchester, Reino Unido, denunció en un informe los crecientes problemas conectados con la imagen corporal en la comunidad LGTB. Formas de clasismo que se están generalizando en el colectivo, y que llevan consecuencias psicológicas muy negativas.
La Fundación explicó de como la presión que se genera en la comunidad LGTB para poseer un cuerpo que tenga determinadas características físicas consideradas atractivas para una larga mayoría, se está volviendo una obsesión. De hecho, el colectivo afirmó que los hombres homosexuales y bisexuales son sujetos a una presión social más fuerte en comparación a los heterosexuales, especialmente en cuanto a sus apariencias.
La presión social en la comunidad LGTB
Ulterior peso en este proceso lo tienen las aplicaciones de citas para homosexuales. Las fotos de cuerpos perfectos, un ideal inalcanzable para muchos, crean una presión social muy difícil de aguantar, especialmente para las personas más jóvenes. Esto lleva quien tenga un físico no normativo a sufrir una forma de exclusión por parte de ciertos ambientes homosexuales, que discriminan en caso de no tener una apariencia homologada a ciertos estándares de belleza.
Un reportaje de la BBC, conectado con la alerta lanzada por el colectivo de Manchester, cuenta la historia de hombres como Jakeb Arturio Bradea, de Huddersfield, Inglaterra, y otros homosexuales que por causa de la presión social presente en la comunidad LGTB, estuvieron al borde de la muerte.
En el reportaje, los entrevistados declararon que recurrirían a cualquier práctica para cambiar su cuerpo y así sentirse aceptados por parte de la comunidad LGBT.
La historia de Jakeb y de la aceptación social en la comunidad LGTB
Como Jakeb afirma en el reportaje, por culpa de los malos comentarios sobre su cuerpo que los hombres que frecuentó le repitieron durante toda su vida, intentó de suicidarse en 2019.
El hombre reveló a la BBC la fuerte atención y los comentarios positivos que alcanzan los hombres con cuerpos que siguen los estándares de belleza, dictados por la sociedad, en las aplicaciones y en las áreas sociales, y como esto afecta el imaginario colectivo en cuanto a como debería aparecer un hombre homosexual. Debido a esta presión, Jakeb empezó a evitar las citas por miedo a que los hombres pudieran comentar negativamente su aspecto físico, y inició a utilizar intensivamente esteroides anabólicos para aumentar su masa muscular.
Las consecuencias del utilizo de esteroides
Ir al gimnasio no era suficiente para alcanzar el cuerpo que él deseaba y que le habría abierto las puertas a la aceptación social que tanto quería. Gracias al contacto de un amigo, pudo encontrar los medicamentos. Desafortunadamente este tipo de sustancias suelen crear dependencia, cosa que paso también a Jakeb, que empezó a sentirse demasiado flaco, a pesar de haber ya alcanzado su físico ideal.
En noviembre de 2019, Jakeb tuvo un infarto debido al utilizo excesivo de esteroides. Y a pesar de salvarse, las consecuencias de la asunción de estas sustancias dañinas, perduran todavía en su día a día. Jakeb asegura que no mereció la pena sufrir tanto para obtener la aprobación de los demás.
La historia de James Brumpton y las consecuencias de la cirugía estética
También James Brumpton, ingeniero de software de Lincoln, tuvo una experiencia parecida. A causa de los continuos comentarios negativos sobre su abdomen, se sometió a una abdominoplastia, para reducir la grasa en la zona de la cintura. La operación de Brumpton salió mal, y lo dejó con cicatrices permanentes y un sentido de inferioridad aún más fuerte de lo que sufría antes, y que afecta todavía su vida. Afirma que, la selectividad del mundo homosexual, lo llevó a este extremo.
Para la ‘Asociación Británica de Cirujanos Plásticos Estéticos’ (BAAPS), en Reino Unido se realizaron 179 abdominoplastias en 2018, con incremento del 18% en comparación al año precedente.
Estas operaciones fueron demandadas por hombres.
La relación entre cirugía plástica y la comunidad LGTB
Según el profesor Afshin Mosahebi (BAAPS), la mayoría de los hombres que se someten a este tipo de operación, son personas homosexuales. Además, confirmó a la BBC la conexión entre áreas sociales, y el incremento de la demanda de operaciones de cirugía estética. Para el doctor, muchas de las personas que quieren este tipo de cambio en su cuerpo, necesitarían de soporte psicológico antes de dirigirse a un cirujano.
A este propósito, Jeff Ingold, exponente de la organización caritativa LGTB ‘Stonewall’, puso en evidencia la necesidad de que haya más representaciones distintas de las personas LGTB en los medios de comunicación, en esta manera se romperían estereotipos dañinos por la autoestima de la misma comunidad LGTB.