La princesa que pierde el zapato de cristal de Disney se hizo famosa en su tiempo, pero hoy en día sigue siendo una de las favoritas de las niñas, quienes admiran la historia de que una doncella maltratada por su madrastra sea salvada por su príncipe azul. Si a todo esto le añades la figura tan delgada de la joven, consigues que muchas niñas quieran parecerse a ella.
Esto es lo que está pasando en el último Challenge que empieza a ser viral en las redes sociales. Viene de Japón y ya se le han añadido países como Reino Unido y Estados Unidos. De lo que trata es de una nueva DIETA, a gusto de quien la realiza, con un objetivo común, llegar al peso de Cenicienta, quienes aseguran que tiene un Índice de Masa Corporal de 18, el cual está muy por debajo del índice saludable, según los expertos.
¿Cómo se calcula el Índice de Masa Corporal?
Los expertos sitúan el IMC saludable entre 18,5 y 24,9, por lo que el peso al que estas jóvenes quieren llegar es irreal y perjudicial para la salud. Para calcularlo debes dividir el peso por la altura al cuadrado.
Si quieres conocer el peso que debes alcanzar para tener la figura de Cenicienta, vale con llevar tu estatura al cuadrado y multiplicarla por el Índice de Masa Corporal de Cenicienta, 18. Así, si una persona mide 1,65 su peso "Cenicienta" se situaría en 49kg. En cambio, si lo que quieres es conseguir un peso ideal, deberías multiplicar por un índice de masa corporal más real, como sería el 22. La diferencia es de unos 10kg, un número lo suficientemente grande como para preocuparse de aquellas que quieren alcanzar la cintura de la princesa Disney.
Consecuencias del reto
La vulnerabilidad de las jóvenes respecto a su físico es cada vez mayor, las redes sociales hacen que veamos figuras perfectas en la fotografía, sin entender que la mayoría son irreales, puro marketing que nos vende un estilo de vida poco saludable y muy superficial.
Deberíamos tener hábitos de vida saludable (entre ellos está la posibilidad de hacer dieta) pero sin llegar a los extremos.
Podemos comer frutas y verduras y no llevar una vida sedentaria, hacer un poco de deporte cada día, sin necesidad de obsesionarnos, pues nuestra salud es lo que está en juego y puede salir perdiendo.
Es cierto que en Japón, país del que nace el reto, las mujeres luchan contra una presión social mayor que en Europa, pero aun así, esa carga nos la traemos hasta aquí para sufrir las mismas consecuencias, cuando lo ideal sería revelarnos contra estos estilos de vida impuestos por la sociedad que solo traen consigo enfermedades, estrés y pérdida de autoestima.