Ourense, como el resto de la Comunidad, recibe con alegría las lluvias de las últimas semanas. Aunque vengan, generalmente, en contextos de tempestad y borrascas con fuertes rachas de viento.

La lluvia que no llega a Ourense

Sin embargo, sigue siendo una de las zonas que no han desactivado la alerta por sequía. De hecho, a lo largo del día de hoy, la Oficina Técnica de la Sequía de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS) va a reunirse y decidir si se mantiene o se rebaja

Efectivamente, la imagen de Galicia como el paraje de los mil ríos y fuentes, la tierra de las nieblas perpetuas y las lluvias incesantes, sufre un drástico cambio en estos años.

Y lo hace determinada por una sequía que, este pasado 2017, ha marcado un hito histórico. La lluvia ha pasado y regado las tierras ourensanas, pero los datos dicen que no llega para cambiar un legado de meses sin ella.

Una ciudad en el límite

Tras sufrir, como el resto del territorio, la oleada de incencidos de mediados del pasado mes de octubre, Ourense ciudad sigue en el límite. El caudal del principal río que abastece la urbe, el Miño, descendió ostensiblemente durante el verano. Se activó la alerta por sequía, pero ha podido mantenerse sin llegar a recurrir a los cortes de agua. Esto sí ha sucedido en algunos pueblos y hasta hubo que trasladar agua en camiones cisterna a alguno de ellos.

El caudal del río ha crecido.

Los datos ofrecen un caudal, dentro de su paso por la ciudad de las Burgas, de 274,37 m3/s. Para comparar la crecida, hace dos meses era de 33 m3/s. Sin embargo, el presidente de la CHMS, Francisco Marín, advierte que la situación es mejor, pero no es la que debería ser a estas alturas del invierno.

Un dato que ha adelantado es que los ríos de la provincia van un 32% por debajo de lo que tendrían que ir.

Lo positivo es que las lluvias caídas estas semanas les han devuelto parte de su caudal. Y que la nieve que ha caído, aunque aún escasa y primeriza, ayudará a paliar futuros problemas.

En pocas horas se actualizarán los datos de la situación y se revisará la alarma por sequía.

El agua nos da vida. Cuidémosla

Este es el lema del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, en su campaña por el ahorro de agua.

Se ha lanzado el pasado martes, día 9, y aparecerá en diversos medios de comunicación. Una vez más, se lanzan las ya reconocidas y típicas recomendaciones: cerrar el grifo mientras uno se lava los dientes o se enjabona, repasar las instalaciones para que no haya pérdidas y llenar la lavadora. Es una campaña destinada al usuario medio.

Los datos estadísticos, de los que participa la ciudad de Ourense, ofrecen una visión preocupante: el año hidrológico 2017 es el 8º más seco desde inicios de la década de los pasados 80, el año natural 2017 es el 2º más seco desde 1965 y, en algunas zonas, este es el 5º año consecutivo de sequía.