El conmovedor vídeo que SOS racismo acaba de hacer público como parte de la campaña #ESracismo, pone de manifiesto la realidad con la que conviven miles de personas en el país.

El experimento, que fue grabado en Barcelona, incluye tanto las respuestas positivas como las negativas de los participantes. Una azafata ofrece participar de un sorteo para pasar unas noches en un spa. La invitación, excluye de manera rotunda a una mujer con pañuelo y rasgos musulmanes que insiste en completar el formulario.

Duele ver la indiferencia de muchos viandantes, que ante la negativa de la empleada de entregarle la papeleta para que firme, hacen caso omiso y depositan su cuestionario, sin más.

La mujer con velo les pregunta, “¿les parece bien esto que hace?”, a la que se sucede un “si ella lo dice” de total indifirencia.

SOS Racismo recibió durante el 2015, 247 denuncias de racismo, la mayor parte de estas ofensas se produce en Aragón y Cataluña. De las casi 250 denuncias, 112 se produjeron en la primera comunidad y 80 en Cataluña. Sin embargo, desde la misma entidad aseguran que el número de delitos, al menos los informados, se redujo con respecto al año anterior. Durante el 2014 se contabilizaron 330 denuncias de racismo.

Las denuncias que SOS Racismo recibe, son clasificadas según la naturaleza a la que responden. El número más significativo se da en conflictos y agresiones racistas, cerca de un 30 % y las de racismo institucional, prácticamente la misma cantidad un 27,53%.

El racismo institucional suele ser denunciado por personas extranjeras que encuentran problemas para regularizar su situación en España u obtener la nacionalidad.

Otros delitos racistas están dados con altercados con personal de seguridad, tanto público como privado, denegación de acceso a prestaciones y servicios públicos, discriminaciones laborales y en muy baja cifra incidentes con grupos de extrema derecha o denegación de acceso a servicios privados.

Según datos ofrecidos por SOS Racismo, alrededor de dos terceras partes de las denuncias son formuladas por hombres, mientras que el porcentaje restante la realizan mujeres. De las 247 denuncias registradas por la entidad, todas fueron presentadas por personas de entre 18 y 65 años. Solo 44 de esas personas que acudieron a SOS Racismo estaban de manera irregular en el país, la mayoría procedentes de África Subsahariana.

Es importante remarcar que 147 de los denunciantes son residentes con permiso y 44 ciudadanos de la Unión Europea.

La entidad, a su vez, asegura que la mitad de las agresiones y conflictos de orden racista se producen entre vecinos. Son los propietarios de pisos aledaños o inquilinos próximos a las viviendas que habitan los extranjeros quienes cometen estos actos.

Con respecto a los delitos de odio, los que conllevan una condena penal, Cataluña es la Comunidad Autónoma que más casos ha registrado, 49 de los 96 denunciados durante el año 2015. Le siguen Aragón con 29, la Comunidad de Madrid y Guipúzcoa con siete denuncias cada una, Galicia con tres y finalmente Navarra con un caso denunciado.