Un rebrote del consumo de heroína, ha alertado a dirigentes y profesionales del sector sanitario. Juan Antonio Beltrán es especialista en Terapia Familiar Sistémica, Máster en Emergencias y Catástrofes y Drogodependencias. Desde hace más de 15 años trabaja en la Comunidad Terapéutica Girasol en el sector de atención primaria de los pacientes que ingresan
¿Cuándo se considera que una persona es adicta?
Se considera que uno es adicto cuando genera una actitud compulsiva ante una situación o sustancia que no puede dejar de repetir o consumir a pesar de las consecuencias negativas que este hábito produce en su vida.
Estas consecuencias negativas pueden acarrearnos problemas en muchos niveles de nuestra vida: a nivel social, familiar, laboral etc.
Es importante hacer especial hincapié en el concepto de “compulsividad”, puesto que una persona adicta no consume, come, juega o realiza la acción que sea porque quiere o por “vicio”, como comúnmente se puede oír, sino porque en el momento no puede evitarlo. Es necesario un trabajo terapéutico en profundidad que indague en la causas reales de su adicción a la vez que la persona junto con el equipo terapéutico va generando hábitos más saludables y que le ayuden a afrontar de una forma más positiva su vida emocional
¿Ha crecido durante los últimos años la cantidad de personas que pide ayuda para curar sus adicciones?
En nuestro caso no hemos notado un cambio especial ni en cuanto a un aumento ni a un decremento de las peticiones de ayuda de personas para tratar su adicción, pero la Comunidad Terapéutica Girasol es un recurso altamente especializado y los pacientes que nos llegan generalmente han pasado varios filtros antes de venir a nosotros.
Recursos como centros comarcales y provinciales, médico de atención primaria y asociaciones de barrio son las que se encuentran a pie de calle y son las primeras en recibir ese impacto.
Por otra parte sí que nos consta a través de la Federación Andaluza Enlace - una entidad sin ánimo de lucro que aglutina a 105 entidades de toda Andalucía que trabajan en drogodependencias, VIH y exclusión social y a la cual pertenecemos - de que efectivamente ha habido un aumento en las peticiones de ayuda a los movimientos asociativos de barrio, por lo menos a nivel andaluz.
¿Qué rasgos o características comunes suele tener una persona con predisposición a alguna de las adicciones que tratáis en la fundación?
Esta es un pregunta difícil de responder y con la que es necesario tener cuidado para no estigmatizar ni profetizar si necesidad.
Como he comentado anteriormente, una adicción es la consecuencia de un desequilibrio en la vida de una persona que deriva en una conducta compulsiva a través de la cual intenta disminuir la ansiedad que dicha situación le produce.
Así que lo que podemos decir es que los desencadenantes de una adicción generalmente encuentran su base en un desequilibrio de orden emocional que es estimulado por las circunstancias vitales de la persona. Esto puede manifestarse de formas muy diversas y complejas según cada caso particular.