La esposa de Kiko Rivera, Irene Rosales, quien ya salió de Gran Hermano Dúo, visitó el Juzgado de Sevilla para encontrarse con Las Mellis por motivo de la demanda que fue interpuesta hace ya algunos meses por Rivera y a la que acude como testigo a favor de su esposo.

Irene Rosales aprovechó su estancia en Sevilla para visitar a su familia y a sus hijas y realizar la comparecencia en el juzgado. Al estar en el mundo exterior, Irene es la que está dando la cara por Rivera, quien aún permanece en Gran Hermano Dúo esperando la próxima gran final del reality.

El motivo de la demanda de Kiko Rivera a Las Mellis

El origen de la demanda que interpuso Kiko Rivera, hace ya casi un año, a Las Mellis se debió a que Bibi reveló en el programa Socialité que el DJ le había realizado insinuaciones y luego la había amenazado para que no contara nada. Pero no tenía ningún tipo de pruebas que pudieran soportar esta denuncia, así que era la palabra del DJ contra la suya.

Motivado por esta acusación, el esposo de Irene Rosales e hijo de Isabel Pantoja decidió interponer una demanda en los tribunales alegando varias cosas, entre ellas que se le había hecho un daño a su reputación y a su honor.

De perder la demanda que ha interpuesto, Rivera debería pagar todos los costas procesales, lo que sería un problema más en el ámbito económico para el marido de Irene.

Por lo que según El Programa de Ana Rosa, el abogado defensor habría presentado una propuesta para conseguir un acuerdo que no fue aceptada por Las Mellis después de ganarle la demanda a Isabel Pantoja.

Kiko Rivera demandó a Las Mellis por la cantidad de 150.000 euros, suma que el fiscal rebajó a 45.000 este martes en el Juzgado Número 10 de Sevilla, siendo una rebaja bastante cuantiosa de lo que se pedía inicialmente.

Irene Rosales, como testigo en el juzgado

La visita de Irene Rosales al juzgado de Sevilla la hizo acompañada del mejor amigo de Rivera en calidad de testigo en el juicio que se lleva a cabo contra Las Mellis, quienes llegaron a tener una relación muy estrecha con la familia Pantoja en el pasado antes de iniciar los enfrentamientos con el clan.

Al salir del juzgado, Irene ha mantenido el silencio y no ha realizado ningún tipo de declaración a la prensa, ya que aún se desconoce el resultado del juicio que se lleva a cabo.

Las Mellis dicen estar bastante tranquilas a la espera del resultado de la demanda, ya que piensan recurrir la sentencia en caso de que les sea desfavorable, estando dispuestas a llegar hasta donde haga falta. Para ellas, el motivo de la demanda en su contra es solo para hacerles daño, ya que en muchos programas se han presentado mujeres hablando mal de Rivera y él no las ha demandado.