El deporte en España está de luto y no es para menos, ya que ha fallecido Carmen Valero, la primera atleta olímpica española, a los 68 años de edad. La Real Federación Española de Atletismo ha comunicado este martes que la deportista ha muerto después de haber quedado en coma días antes por causa de un derrame cerebral.
El legado de Carmen Valero
El fallecimiento de Carmen Valero ha ocurrido en Sabadell. La atleta fue desconectada de la máquina que la mantenía en coma. Hasta ahora se desconoce qué le produjo el derrame cerebral y si era alguna consecuencia de algo que padecía desde hace algún tiempo.
El mensaje de la RFEA muestra el legado que dejará no solo en los deportistas sino en las mujeres. “La mujer que abrió camino. La madre de nuestro atletismo”, fueron algunas de las sentidas frases que ha escrito la organización. La deportista española estuvo presente en el IV Memorial Miguel de la Quadra-Salcedo en mayo del pasado año. Allí la Asociación Española de Estadísticos del Atletismo la nombró la mejor atleta femenina del siglo XX.
Por su parte, Raúl Chapado, quien es el presidente de la RFEA, en la red social X expresó un sentido mensaje de condolencia y de admiración para Carmen Valero. Chapado escribió que ella transformó la historia y que su talento se demostró en medio de circunstancias complicadas para una mujer.
Los mensajes fueron similares de parte del Consejo Superior de Deportes, que afirmó que el legado de esta deportista es imborrable, además de ser la primera atleta olímpica española y que será una guía para todas las mujeres que siguieron sus pasos.
Carmen Valero nació en 1955 en Castelserás, un 4 de octubre, pero se mudó a Cataluña al poco tiempo.
Su hogar fue en Sabadell hasta el día de su muerte. "Me siento medio catalana y medio maña", afirmaba la deportista. Fue en el año 1969 que empezó su carrera deportiva en el atletismo bajo la guía del entrenador Josep Molins.
La lucha contra la discriminación por ser mujer
Sus logros deportivos resaltan con dos títulos mundiales de cross en Europa.
Su lucha contra la discriminación por ser mujer en ese entorno deportivo no solo fue aguantando las burlas cuando competía o salía a entrenar con pantalones cortos, sino que también se enfrentó contra la Federación Española.
En su última entrevista, la deportista pudo comentar algunos de los problemas que soportó por ser mujer y estar en ese mundo olímpico para aquella época. Entre otras cosas, dijo que a las mujeres ni siquiera les avisaban de las reuniones que se hacían antes de las competiciones. También mencionó que eran discriminadas por la forma de su cuerpo.